One shots || Simbar/Michaentina❤

~Crash~ Simbar❤

27 de julio de 2019

Mi vida en París era como la de todos los adolescentes de mi edad, intentaba vivir al máximo con mi mejor amiga y compañera de departamento, pero ambas estábamos solas en esta gran ciudad así que sí, nuestra vidas no era tan parecida a la de ellos, porque nosotras teníamos que trabajar para pagar nuestros gastos. Mis padres estaban en mi país natal, ellos realmente no querían que yo viniera a París, pero era un sueño por cumplir y no dejaría pasar esta gran oportunidad. Estaba en la universidad de escritura, escribir era mi pasión y lo hacia desde muy pequeña. No viene de mi familia, soy la chica extraña que ama la musica, leer, escribir y el teatro, a pesar de ser un bicho raro tenia a mi mejor amiga quien estaba conmigo cada vez que quería tomar una decisión importante. Mi mejor amiga es como mi ángel, mi hermana. Ella siempre estuvo conmigo en los momentos difíciles y me impulso a seguir lo que quiero, tuve suerte de encontrarme con ella en la vida y también suerte de encontrarme a aquella persona, aquella que a pesar de los años, sigue siendo lo que más quiero. Simón Alvarez.

Cuando tenia 14 años me mude a México buscando un nuevo comienzo junto a mi mamá, quien conoció a su pareja y el se porto como una buena persona, así que estuve feliz cuando mamá se divorcio de mi estúpido papá y lo conoció a él. Entre a la secundaria y me sentí lo mas nerviosa que jamas pude estar, a pesar de todo en ese lugar conocí a mi mejor amiga Delfi y a mi muy buenos amigos y lo conocí a él, a Simón. En un comienzo todo parecía extraño junto a él. Las cosas no iban como esperaba, él tenia novia y yo no me quería interponer. Luego de un tiempo de ser amigos, comenzamos a ser algo más, siempre creí que la mejor relación se daba entre amigos y así lo fue, el tiempo que duramos fue uno de los mejores de mi vida, él era increíble, nos divertíamos como nunca y fue mi primer amor.

Luego de un tiempo, él y su banda comenzaron una carrera como cantantes, algo que empezó como un hobbie termino siendo en el mejor trabajo. En un principio no había día que no llorara por no estar junto a él, no encontraba palabras para decir cada día que el llamaba para saber de mi y nos quedábamos unos minutos en silencio a través de la línea telefónica. Simón me enseño a tocar la guitarra, piano y gracias a él, se que tengo un don para cantar y la valentía de hacerlo frente a alguien mas. Hacíamos covers de nuestras canciones favoritas, son vídeos y fotografías que sigo guardando hasta el día de hoy, yo no los olvide, pero él... él si lo hizo. Al paso de los años perdimos contacto y a veces hablo con Pedro o Matteo por mensajes o por teléfono, pero si no fuera porque es amigos de ellos, no sabría nada de Simón. Estoy feliz por todo lo que lograron, por todo lo que son ahora, pero no puedo evitar pensar una noche en él. Simón dijo una vez que a pesar de estar a mundos de distancias, yo seguiría siendo su chica. La diferencia es que él ya no es mio.

Negué con la cabeza tratando de alejar todo pensamiento de mi pasado y de Simón. Es verdad, son cosas de las que me voy a arrepentir y es un pasado muy lindo y único el que viví, pero ahora estaba en mi presente y por cosas del destino, Simón no esta en el.

Llegue a la puerta de mi casa y escuche risas adentro, me parecía raro, Delfina siempre llega una hora mas tarde que yo.

Puse la llave en la manija y la gire para abrir la puerta. Me quite el gorrito de lana y sentí como las voces se callaban delante de mi presencia. Un castaño de brazos y cuerpo más grande de lo que recordaba me sonreía de oreja a oreja y corrió hasta mi para subirme en sus brazos.

-No creí que estuvieras mas guapa querida Ámbar- Pedro me dio una calurosa sonrisa que me hizo sentir en casa, en esos tiempos donde todos eramos felices y veíamos películas todos los viernes en casa de Matteo, en cuando eramos solo unos niños preocupados uno del otro.

-No te quedas atrás, te ves mejor en persona que en fotos Pedro Arias- reí y le palmee el hombro. El hizo una sonrisa de lado y miro a mi amiga, quien le devolvía la mirada un poco tímida.