Pasé mi brazo por la espalda de Carl para ayudarlo a caminar, ya que se tambaleaba de un lado al otro.
-Rosse, tienes que perdonarme.- Dijo mientras las lágrimas rondaban por su mejilla.
-Carl, no es el momento, estás ebrio y esto no lo recordarás mañana.- Dije sintiendo un vacío por dentro.
Él solo hizo un sonido, y siguió subiendo las escaleras con mi ayuda.
-smile souling, my love, my hope, she's my souling forever, every morning I feel happiness, oh souling we'll always be together, one heart, love- Susurró torpemente -¿Lo recuerdas?- preguntó, sentía la vista nublada, ya me encontraba llorando para ese momento -Te canté esa canción el día que prometí amarte en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, amarte y respetarte, y creo que he roto casi todas mis promesas- dijo ahogándose en llanto -Yo.. Yo necesito que de verdad me perdones-
-Cariño, está bien, solo fue una falta de auto control, seguro que no pasará más- Dije abrazándolo, lo amaba tanto y esperaba que de verdad no volviera a suceder...
-Lo prometo- Dijo.
-¿Qué?- Pregunté confusa.
-Prometo que no volverá a pasar- respondió, lo llevé a la cama donde le quité la ropa para que no durmiera de manera incomoda. Di la vuelta y me acosté del otro lado, la calmada y pausada respiración me dio a entender que Carl ya estaba dormido, poco a poco mi respiración se fue normalizando hasta que caí en un profundo sueño.
Sonidos estruendosos me hicieron abrir los ojos, Carl rebuscaba entre la comóda lanzando todo al suelo mientras maldecía.
-Carl- hablé con voz somnolienta -¿Qué estás busc...
-Maldita sea, ya era hora que te pararas, ¿quién piensas que hará el desayuno?- Interrumpió agresivo. El vacío volvió, era algo que bajaba por todo su cuerpo que le hacía sentirse de manera terrible. -¿Dónde están los documentos que dejó Zayn aquí la ultima vez que vino?- preguntó furioso.
-No lo sé Carl, los guardaste tú- respondí, levantándome para hacerle su desayuno.
-Cuando termines de cocinar los buscas, Zayn viene dentro de unas horas- Dijo azotando la puerta. Caminé con la cabeza baja al baño para darme una ducha.
Abrí el agua caliente y metí mi cuerpo sintiendo mis músculos relajarse, observé mi brazo y tenía unos pequeños hematomas con forma de dedos, al salir me puse una camisa manga larga para tapar las marcas del brazo. Bajé a la cocina y saqué lo suficiente para hacer unas tostadas. Le había pedido muchas veces a Carl que contratara a alguien que preparara la comida, pero el decía que para eso me tenía a mi. Se me revolvió el estómago al ver la comida, el apetito se me había ido con todo lo que había sucedido esa larga y dolorosa semana. Terminé de cocinar, puse el plato con la comida en la mesa, y llamé a Carl a comer.
Me agarré el cabello en una coleta y empecé a buscar por todos lados aquél documento que Zayn había dejado aquí. Detrás de un mueble, lleno de polvo se encontraba el documento y manchado por el sucio. Caminé hacía la mesa y lo dejé ahí.
El timbre resonó por toda la casa, caminé hacía la puerta viendo primero para ver quien era, abrí inmediatamente.
-¡Zayncho!- Exclamé abrazándolo.
-¡Ro! Una eternidad sin verte- Bromeó, ya qué había venido hace dos días. Le hice una seña para que entrara enseguida llegó Carl a la sala de estar, saludo a Zayn con su típica palmada en la espalda.
-A ver, tráeme ese documento con el cuál ganaré muchos billetes verdes- Dijo Zayn subiendo las cejas.
-Enseguida- Dijo yéndose a la cocina donde yo le había puesto el documento. -¡Rosse, linda! ¡Ven!- Gritó Carl, mi corazón se aceleró, hace tanto tiempo que no me decía "Linda", caminé hacía la cocina pero me llevé una decepción cuando me agarro por el brazo fuertemente, sentí dolor. -Que sea la ultima vez que recibas a Zayn en pantalones cortos, y para la próxima no seas tan estúpida para dejar que un documento tan importante se ensucie ¿Entendiste?- preguntó, solo bajé la cabeza pero eso lo enfadó mas, apretó mas fuerte el brazo moviéndome bruscamente - Te he pregunté que si me entendiste puta- Susurró, quizá para que Zayn no escuchara.
-S.. si- Dije con voz temblorosa, tenía un nudo en la garganta, y mi brazo dolía, el me soltó y salió de la cocina, me pegué a la pared bajando por ella llorando con la cabeza entre mis rodillas, esperé un rato y me levanté y salí de la cocina con un vaso de agua, sentándome en uno de los muebles donde estaban los dos hombres hablando de negocios, Carl pasó su brazo por mi cintura simulando que nada pasaba, simulando que eramos la pareja perfecta, un escalofrío recorrió mi espina dorsal y las mariposas aparecieron en mi estomago. Zayn me miró la cara y arrugó la nariz y su mirada pasó de diversión a preocupación...
-¿Rosse, estuviste llorando?- Interrumpió Zayn la charla que Carl estaba dando. Carl dirigió su mirada a mi fulminándome...
