Era el primer día de clases en preparatoria. Las vacaciones habían fracasado por completo: me la pasé todos y cada uno de los días encerrado en mi casa (solo salía a alguna plaza el fin de semana) y el único día que salí fuera de la ciudad fui a un balneario y me requemé, además de que me dio una infección en la garganta y me la pasé en cama el resto del periodo vacacional. De hecho aún tengo la piel algo rojiza y he recibido algunas burlas por parte de los que parecen estar en 3er semestre. No me importa.
También tuve que irme de mi vieja escuela, pues no había preparatoria, aunque sigo extrañando un poco a mis viejos amigos. Sin embargo, mis padres leyeron en internet que esta escuela era la mejor de la ciudad y decidiron meterme. Y que afortunado fui; no por la educación, sino porque ahí conocí al amor de mi vida... Pero me stoy adelantando.
Estaba sentado en mi pupitre (elegí uno justo al centro del salón), cuando vi en la entrada a una mujer de treinta y algo, con cabello negro, piel algo oscura y nariz pequeña. ¡Obvio que ella no es el amor de mi vida! Con ella venía una chica como de mi edad: Piel clara, ojos castaños, cabello castaño rojizo y más alta de lo normal. Se dirigía hacia el salón, se dirigía hacia mi. Fue amor a primera vista.
ESTÁS LEYENDO
Pequeño amor
RomanceEl amor llega cuando menos te lo esperas y esta historia no es la exepción. Esta historia narra un pequeño amor que te conmoverá.