El cielo estaba pintado de gris, las calles silenciosas mientras a lo lejos se escuchaba el aullido de algunos perros. Volviendo el día mas tenue minuto a minuto.
Si fuese de noche, tendría miedo y sentiría que una jauría de perros hambrientos vendrían a devorarme. Pero eran las cuatro de la tarde y un viento veraniego que anunciaba una clásica lluvia, alborotaba mi corto cabello y secaba el leve sudor de mi frente.June: Parece que encerraste tu resistencia en el balut de tu casa -parloteo aún trotando y mirándome de reojo con una medía sonrisa-
____: -Mis pies daban pasos torpes y vagos, dolían como si corriera sobre piedras, mi respiración estaba mucho mas agitada de lo normal y trotaba, bah, mejor dicho caminaba como borracho mientras sentía todo el peso de mi cuerpo sobre el brazo que deje agarrado a mi cintura- ¿Esta es tu nueva manera de distraerme? -murmure con los ojos cerrados, voz quejosa y el ceño un tanto fruncido-
June: -trotando en el mismo lugar con esa musculosa negra deportiva, que rara vez usaba- Dale ___, vamos. No nos iremos hasta terminar el recorrido, no me importa mojarnos -con tono de enfado emite esas palabras-
____: Ya va a llover~ -me quejo, sentada sobre el césped alado de el cemento donde el trotaba y yo caminaba como ebria- Con la lluvia y el sudor que tengo, oleré a basura June. Dejémoslo hasta acá por hoy -suplique haciendo muecas de sufrimiento-
June: -Aún trotando en el mismo lugar mi amigo se negó- No no~ a mí no me vengas con esas caras tuyas, no caeré, no esta vez. Vamos ___, dale -Me levanta de un estirón, colocándome delante de él así no dejar que me escabulla y tire nuevamente al suelo- ¡Go go! uno dos uno dos.
Y yo que quería pasarla hoy sola tirada en el sofá leyendo, con mi mp3, mirando una película o solo mirar el paisaje que brindaba mi ciudad desde la terraza de casa.
[-]
___: Ni me hables de eso. Al parecer cambiaron el proyecto original a último momento y quieren que lo reorganice. -digo con una pizca grande de enojo en mi rostro y voz- No se si decirles que me paguen denuevo porque el trabajo ya lo terminé, que ellos lo cambiarán no es problema mío. -Susurro avergonzada, mientras veo a mi compañero limpiar con un trapo la mesa donde estoy sentada, jugando con el cuadernillo de pedidos-
Jimin: -lanza una carcajada sutil- Creo que es la primera vez que te veo enojada, preocupada y avergonzada a la misma vez -lo pateo levemente por debajo de la mesa y el atina solo a quejarse para después sonreír- Bueno~ ¿Porqué no arreglas eso con ellos mientras hablas? O sí querés te acompaño mientras conversan, para recalcarles que son unos aprovechadores si no te pagan.
___: -Juego con mis dedos- Nose porque soy tímida cuando estoy frente a profesionales, me cuesta hablar de esos temas monetarios.
Jimin: -También se sienta- La mayoría son así, si te notan tímida te van a utilizar y aprovecharse. No les demuestres flaqueza mientras hablas -hablá mas animado- Imagínate que son el jefe -Pero el jefe da miedo le hago recordar- Pero aveces lo cuestionas, hablas o retas como si fueras mayor, solo hace lo mismo con ellos lo mismo que con el jefe.
___: ¿Crees que así estaría mejor? ¡Agh! Nose nose -me estiró sobre la mesa dejando mi frente apoyada en esta misma- Quiero que sea mañana para no tener esta cita o al menos tener esa confianza tan característica tuya.
Jimin: -sus ojos forman dos líneas rectas con el entrecejo arrugado y una risa ahogada, silenciosa dejando mostrar esos perlados dientes que tenía- ¿Yo confiado? Si supieras mujer, si supieras -se limpia una lágrima producto de la risa silenciosa- Ve a cambiarte que ya están por llegar.
Nuestro turno ya había terminado, era hora de cambiarnos e ir cada uno por su lado. En una hora el café iba a cerrar, así que mi cita llegaría pronto. No estaba nerviosa. Estaba aterrada, asustada, con ganas de que la tierra me tragara. Me gustaría que mis palabras fluyeran con facilidad esa noche pero mi timidez se hizo presente yace horas.
Jimin: ¿___? -musito para dar a entender que sigo ahí- ¿Ya estás?
____: Sí. -inhalo y exhalo lentamente al tiempo que el pelinegro entra-
Jimin: Oye -sonríe de forma cálida mientras se posiciona de cuclillas frente a mí, tomando mi mano entre las suyas- Tranquila, vas a estar bien. Los vi y no dan miedo. Puedo con ellos -me sorprende que su melodiosa voz y esa sonrisa me hayan tranquilizado un poco para ser sincera- Voy a estar ahí con vos, no vas a estar sola.
___: No es eso, no es que ellos me den tanto miedo, solo un poco -sonrió- Es que nunca me rechazaron algo, eso hace que mi poca confianza disminuya. No puedo creer que esto me de más inseguridad y miedo que muchas otras cosas. Te parecerá estúpido pero es así.
Jimin: No fue tu culpa, ellos son los idiotas que no se deciden. Si realmente detestaron lo que les diste buscarían a otra persona, capaz con más experiencia ¿No crees? -Asiento con la cabeza mirando al suelo- Dale, vamos.
_: -Damos unos pocos pasos a la puerta, pero me detengo- ¿Jimin? -susurro mirando al suelo aún- ¿Me das un abrazó?
No me considero una persona del todo abierta pero tampoco soy tan introvertida, soy mas del tipo que no habla mucho con extraños y se incómoda con gente que no conoce. Pero eso aveces varia por mi estado de ánimo. Con Jimin fue diferente ¿La razón? Nose. Me acuerdo de ese intercambio de sonrisas en el bus, las tardes de trabajo compartidas. Anécdotas tristes, vergonzosas o chistosas que nos contábamos cuando salíamos del café, las salidas con mis amigos o la vez que fui a verlo bailar sola, pero me fui rápido porque quería presentarme a sus amigos. Ese día me acorde de Naeun aunque Jimin con sus gestos y cara sonrojada me hacía olvidar todo.
En tan solo 2 meses entró dando grandes pasos en mi vida, se metió de lleno en mis días intentando tapar recuerdos dolorosos que se reflejaban en mis ojos mirando de forma perdida al recordar mi amor pasado. Ya no es mi compañero, ya no es un conocido. El ya es mi amigo.
Nunca pedía abrazos ni nada que se le pareciera, pero mi corazón se aceleró cuando se lo pedí a Jimin. Conté cinco segundo entre mis palabras y el acto, sentí sus brazos enrollarse en mis hombros y los míos abrazaban su cintura.
Pum pum pum [...] Podía sentir su corazón acelerado y puedo jurar que él el mío, pero no malinterpretaria eso. Porque el es gay.
ESTÁS LEYENDO
Nunca te dire Oppa (Jimin y ___)
Fanfiction___: Chim dejame! -Dicho entre carcajadas- Jimin: Dime oppa. -Sonrie sin dejar de hacerle cosquillas a ___ ___: Op.., no puedo mi mamá no me deja. Jimin: Que decis, si tu mamá me quiere de yerno. -Las carcajadas no paran- ___: Le dire al jefe. Jimi...