Carta número 0.

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Nuestras vidas son tan fáciles de consumir como un cigarro.

Aspiras, tragas el humo, lo sueltas y antes de darte cuenta, ya se ha acabado.

¿Qué vas ha hacer comprarte otro y repetir lo mismo?

Bueno, puedes hacerlo, pero desgraciadamente, no puedes hacer lo mismo con tu vida.

Debes atesorarla, solo vives una vez, lo has podido tener todo, o no haber tenido nada, pero, debes mirar hacia delante, no arruines tu presente por un pasado que no tiene futuro- William drearasy.

Esta...No está del todo bien.

Le falta algo.

¿Qué le falta?

He tardado horas en escribir estas lineas.

¿Verdaderamente esto llegará a los corazones de la gente?

-Will, ¡Es hora de ir a clases!

- Sí, mamá, ya voy.

Guardé la carta sobre la mesa, en mi mochila, y me apresuré a vestirme.

-¡¡Will!!- Volvió a gritar mi madre.

Bajé corriendo cogí mi desayuno y me apresuré  corriendo hacia el bus, me monté y listo, solo faltaba llegar a el manicomio...Aun que eso es solo como yo lo llamo, en verdad, solo es un colegio con muchos locos.

Oh, supongo que aun no me he presentado.

Me llamo William Drearasy.

Hoy, he escrito mi primera carta de suicidio, pero por alguna razón, no era lo suficiente buena.

No es que yo quiera morir ni nada, pero, tampoco es como si quisiese vivir.

Mi padre se fue cuando tenía 5 años y cada día recuerdo menos su cara. Mi madre nunca me quiso decir la razón por la que mi padre se fue, aun que la verdad es que no me importa. Aun así, desde ese día hay un vacío en mi pecho que nunca podré rellenar.

Y un día, mientras dormía pensé. ¿Habrá personas que se sientan igual o pero que yo?

Si es así, ¿Querrán morir?

Tengo que evitarlo.

 No es como si quisiese ser un héroe, ni nada por el estilo, solo, no quiero ver a más gente sufrir.

Siendo así, decidí, escribir una carta de suicidio, una que conmueva los corazones de todos los que la lean.

 Mi madre es una famosa poeta, así que, supongo que la muerte de su hijo será un gran escándalo que llamará a la prensa y los paparazzi.

Quizás sea un poco cruel, pero...

Mi sueño es cambiar a las personas.

Cartas suicidas de un poeta.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora