Ah, dichoso mayo. Época de festividades y puentes vacacionales mexicanos. Días libres, es lo que cualquier persona cansada desea ¿no?
Sean bienvenidos. Les presentamos el paquete de las festividades inútiles, incluye (entre otros) el día de las madres. Aquellas hermosas mujeres que nos trajeron al mundo, más que ello, se dedican a sustentarnos. Una multitud de engendros caprichosos y muchas veces abusivos, es lo que tienen como premio.
¿Por qué festejar? Un montón de bailes en las escuelas primaria son su recompensa, implicando el gasto entre vestuarios, cooperaciones etcétera.
Permitanme describir un caso. Hace tres años, durante mi época como estudiante de nivel básico, es en México, una tradición (por llamarlo de alguna manera) realizar un festival en los colegios. Rifas se realizan y "magníficos" premios son otorgados a las mujeres, todo lo que se piensa una madre puede desear. Los clásicos regalos nunca faltan: licuadoras, planchas, etc. Todos, materiales para el uso doméstico.
"Oh, gracias querida. Ahora podré planchar mejor tu ropa para tenerte más contenta" (sarcasmo incluido). Eso es, algo que en mi opinión personal, diría a mis hijos (si llego a tener) en caso de que cometan la barbaridad de obsequiarme algún instrumento parecido. Incluso, no dudo que aquel pensamiento pase por la cabeza de alguna mujer (incluida mi madre).
Sí, considero esta festividad inútil (como muchas otras) , más que por mi carácter puramente antipático, por el hecho de que se aprovecha este día para "arreglar" todas las tonterías ocurridas y por ocurrir hasta el próximo 10 de mayo. Argumento esto, basándome en experiencias cercanas a mi. Hermanos peleados, conflictos familiares, reuniones en donde la madre de las madres presenta un irreparable rostro cansado, agotado y hartado de todas aquellas acciones cometidas por los seres que ella misma engendró hace años. ¿Qué si hay amor? ¡claro que hay amor! Lo que me causa un grado nuevo de molestia, es observar que este se ve cada vez más eclipsado por aquellos conflictos presentes, convirtiéndose en el pan de cada día.
El caso que previamente expongo, es ocurrido en un ambiente más "maduro" (para otras definiciones, véase "adulto"), poniéndolo entre comillas por que no muestra nivel adecuado de dicho calificativo. Sacando a luz uno más acorde a mi edad, podemos ver a aquellos jóvenes cuestionando a sus allegados cosas como "¿qué le vas a dar a tu mamá?" (sí, haciendo referencia al regalo) seguido de una respuesta simple como "nada". Y es así como sencillamente se gana el comentario de "eres un mal hijo".
Eso, me lleva a un nuevo nivel. El trato especial en este único día. Los regalos de mala calidad. El típico "no te preocupes, yo lavo los platos" para que al amanecer siguiente podamos volver a los viejos hábitos en donde es la madre la que daña sus manos al regresar al frío contacto con el agua y el cloro.
Resumiendo, odio la doble moral de este día (y de otros en general), así que , por favor, por amor a esa mujer que todos aseguran es tan especial, paren con su clásico "feliz día de las madres" cuando ninguna de sus acciones refleja el deseo de dar felicidad o dar un mínimo agradecimiento. ¿Por qué reservar los buenos tratos para este día? ¿por qué no cambiar y demostrar cariño, amor y devoción siempre , incluso si es solo en pequeños detalles?
Dudo que algo así pueda llegar a pasar. Dejar de lado la doble moral es una especie de utopía para mi, sin embargo, no me gusta quedarme con ganas de más opiniones, así que ¿qué piensan de esto?
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Ensayos
De TodoSimplemente una faceta mía problematizando hasta lo más trivial. Aclaro, antes que nada, que escribo estos ensayos con la única intención de expresar mi opinión y conocer la de los lectores. No busco ofender a nadie y si ves en este libro algún tema...