Cartas a Un Amor Platónico

lunes, 3 de abril de 2017

Han pasado 4 días, 4 días,
Desde que volví a escribir sobre ti…
Justo el día después de haber escrito sobre esto que siento
Y que me tiene tan confundida, te vi. 

No puedo decir qué sentí al verte,
Pero lo que sí sé,
Es que no quería irme,
Aunque mentí y dije que si quería. 

Sé muy bien que
Fue un encuentro por “calentura”,
No intento romantizarlo
Por medio de estas palabras.

Pero hoy, 3 días después
De haberte visto,
Me he dado cuenta
De que por ti dejaría
De hacer ciertas cosas,
Como por ejemplo,
Dejaría de hablar con 10 hombres,
Que al fin y al cabo son irrelevantes,
Porque no son tú. 

Y si contigo algo fuese posible,
Incluso me atrevería
A cambiar mis planes futuros,
Solo para hacer unos contigo.

Aun así, a pesar de todo,
Pienso que tal cosa no existe,
Que es solo una niñería,
Que lo que siento no es real. 

Pero, ¿si no es real?
¿por qué cada vez que recibo un mensaje tuyo me siento tan atontada?

Y no vale la pena,
No vale la pena
Escribirte de esta manera,
Pero aun así te escribo,
Te escribo las cosas que
Jamás me atreveré a decirte. 

No me atreveré por miedo,
Por miedo a la respuesta,
Por miedo a que las cosas cambien,
Por miedo a que me veas diferente. 

Soy consciente de que debería decirte,
Aunque sea solo para que lo sepas.  Porque no espero nada de ti,
No lo haría con ese fin
De recibir algo a cambio. 

Si no te nace,
No puedo hacer nada.
Eso es lo triste de esto,
Que yo sé, en el fondo,
Que esto no será recíproco. 

Pero, aunque lo sé,
Siento una urgencia inmensa
De decirte lo que siento. 
Y por esta misma razón,
Últimamente lo único que pienso es
Que debería alejarme.

Alejarme para no tener que decirte
Como me siento,
Para que no sepas
Que hice lo que dije que nunca haría,
Lo que muchas veces dije
Que no me sucedería. 
Pero como la vida es así, heme aquí.
Me enamoré de ti.