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Después de haber ido al restaurant YoonGi lo llevo al hotel junto a ese restaurant.

Tenia planeado dormir toda la noche con su pequeño y oler ese aroma que tanto le encantaba.

También poder ver su cara de recién levantado y darle un besito cuando abriera los ojos, compartiendo todas las bacterias que se encontraban en la mañana.

Pero al parecer ese no era el plan de Jimin...

Quien lo había esperado con un vestido rosado.

Jimin estaba en el centro de la cama con un vestido rosado con muchas capas y corto, junto con unas medias rosadas de terciopelo hasta la mitad del muslo.

-¿L-le gusta hyung? -pregunta mordiéndose el labio.

YoonGi no se lo esperaba, ni siquiera se lo había imaginado. Entró en la habitación y cerró la puerta sin apartar la mirada del menor, no vaya a ser que apartara la mirada y desapareciera.

Comenzó a acercarse a él mientras empezó a desabotonar su traje elegante que eligió con esmero para su cita con su pequeño en aquel restaurante

Jimin abrió sus brazos para recibir al mayor quien se montó en la cama de rodillas y se acercó al pequeño entrando en sus brazos y terminando de quitarse su saco quedando su camisa de vestir a la vista.

YoonGi puso al menor en sus piernas y lo miró completamente de cerca haciendo que este se sonrojara más de lo que ya estaba y que espere su respuesta con ansias.

-Me encanta -dijo YoonGi todavía anonadado-, en verdad me encanta.

Su respuesta hizo sonreír al menor haciendo que sus ojos se entrecerraran. «Se ve tan lindo sonriendo» pensó el mayor sin poder evitar sonreír al ver su sonrisa y lo tierno que se ve haciéndola.

-¿En serio, Hyung? -preguntó Jimin rodeando su cuello con sus brazos- ¿Se me ve bien?

YoonGi todavía no se lo creía y lo miraba de arriba a abajo mordiéndose el labio inconscientemente.

La forma tierna de hablar y hacer expresiones de Jimin lo sacaban de quicio. Ni siquiera estaban de acuerdo con la situación, pero de una manera algo peculiar lo excitaban inexplicablemente.

-No solo te ves bien -empezó a hablar YoonGi acariciando la pierna del menor subiendo su mano poco a poco-, te ves lindo, tierno -El escuchar lo que le dice YoonGi lo hacia sonrojar-, deseable, sexy -Cada vez subía más su mano ya metiéndola en el vestido. Se acercó a la oreja del menor-, sensual, seductor, atractivo...

-Hyung -dijo Jimin apartando su mirada del mayor demasiado sonrojado y avergonzado.

«¿En serio así me veo para él?» pensó Jimin sintiéndose orgulloso de la impresión que le dio a su mayor.

-Puedo seguir todo la noche -le susurro YoonGi ya llegando su mano a la cadera del menor y relamiéndose los labios al notar que no traía ropa interior.

-¡Hyung! -dijo Jimin casi en un quejido sintiéndose muy avergonzado y dando un pequeño bote en las piernas del mayor. Eso le encantó.

El mayor, con su mano libre, agarró la barbilla de Jimin y lo giró para que lo mirara. Se acercó lentamente a su rostro haciéndolo desesperar y lo besó lentamente, pero con pasión.

Pequeño. » YoonMin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora