Era un día muy lindo en el que el cruel verano que quería olvidar por fin terminaba, ya que habia nueva gente en mi vida.
Solo quería olvidar, superar, ignorar lo que habia pasado en ese verano; pero ya no importaba, ya que apenas estaba empezando el bachillerato, lo que espere la mayor parte de mi vida; todo el mundo (mi pequeño mundo) lo relata como la mejor etapa de su vida.
Decidí mudarme de país, realmente quería alejarme de todo; mi mamá me apoyó totalmente y me trajo a su lugar natal, a Jalisco, México; a Guadalajara. Honestamente es un lugar muy bonito, tiene mucho color.
Llegamos 2 semanas antes del inicio de clases, mi mamá tenia contactos en la escuela de este lugar y lograron conseguirme un lugar en mi nivel académico en el que voy. Decidimos rentar un departamento con el dinero que teníamos ahorrado, que tenia una muy linda vista, es un lindo departamento, la verdad me encanto.
Y por fin despues de acomodar tanto, de conocer una parte de Guadalajara, empezó lo pesado. Mi primer día en una escuela de otro país.
Estaba nerviosa, aqui no hay casilleros en las escuelas, aqui tu cargas tu mochila por toda la escuela con lo que necesites dentro de ella. Mi mamá me mando solo con un recopilador, tres plumas (negra, roja, azul) y un lápiz, ella dijo que eso era suficiente para el primer día.
Me vestí lo mas casual que podía, no quería llamar demasiado la atención, asi que vestí lo típico, unos jeans, una blusa, tenis y todo de colores neutros.
Encontré mi aula gracias a un mapa, no queria preguntarle a alguien mas; entre y lo dificil fue escoger lugar, lo bueno era que nadie se conocía asi que podia empezar desde cero en cualquier grupo. Asi que decidí sentarme exactamente en la banca que esta a la mitad del salon.
Entro la primera profesora, se presentó correctamente, pero la verdad se me olvido su nombre; ella hizo lo de cada profesor, presentarnos para conocernos mejor, una estrategia de los maestros para ganar tiempo en lo que tienen las listas.
No recuerdo loa nombres de cada uno de mis compañeros, ya que era el primer dia, creo que no era necesario memorizarlos tan rapido. El unico que recuerdo era del que estana sentado atras de mi, ya que en cuanto dijo su nombre se me puso la piel de "gallina" de saber que ya seguía yo y no recordaba que tenia que decir, asi que le puse atención a mi compañero de atras.
-Hola! Mi nombre es Alejandro, pues... me gusta la musica, creo que a todos, y pues mi hobbie es creo que es leer y tocar guitarra, si creo que solo eso. Ah y es un gusto conocerlos!
Lo dijo con alegría y tan natural, creo que a mi nunca me saldría asi, y lo hice de la manera mas sería posible.
-Hola, mi nombre es Alice, pues me gusta la musica y leer, mi hobbie es dibujar y practicar deporte, espero y nos llevemos bien.
Fue todo lo que podia decir, me estaba muriendo de nervios. Tambien recuerdo lo que dijo mi compañera de enfrente.
-Hola! Mi nombre es Citlalli, la verdad a mi me gusta demasiado la musica, mi hobbie es tocar el violín y el piano, espero y poder agradarle a todos!
Lo dijo con una alegría tan natural, recorde bien su nombre porque ademas de eso, esta muy bonita, tiene una tez blanca pero linda, un cabello largo color negro, y la recuerdo bien porque la observé detenidamente. Ademas de que su alegria ayudo a relajarme.
Terminaron las clases, no fue un día tan mal, lo mejor fue cuando terminaron las horas; mi compañero de atras, Alejandro me invito a salir junto con Citlalli y otro compañero que estaba a mi lado.
-Oye Alice- me dijo mientras me veía guardar mis cosas.- no quisieras ir a comer unos helados o alguna merienda con Ricardo, Citlalli y conmigo?.
Lo mire, por primera vez y era alguien que yo consideraba apuesto, asi que me quede un rato en silencio analizando sus facciones, cuerpo y todo, hasta que su mano en mi hombro me hizo volver a la realidad, asi que acepte con gusto.
-Si claro! Por que no?
Y en ese tiempo despues de clases me hice mis primeros amigos en este país, son muy agradables. Nos llevamos tan bien que cada quien paso si numero de teléfono a todos para crear un grupo en una app que se llama whatsapp, en el que me agregaron y empezamos a charlar mas cuando cada quien llego a su casa. Son muy agradables la verdad.
Asi que me sentí muy comoda al añadirlos a mi propia pequeña galaxia, que ya dejaría de ser solo mia.
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Estabamos tan cerca, pero tan lejos como los humanos de las estrellas
Novela Juvenil¿Sufrir de un desamor puede arruinar tu vida? ¿Estar solo puede ser tan malo como parece? Alice había sufrido en el verano pasado, al punto de mudarse de país y de continente para olvidar lo que paso, sin embargo la vida en otro lugar puede ser que...