Para pensar en rendirse primero debemos conocer el sabor de la derrota
Aquellos que piensan negativamente y sin escrúpulos lo gritan a los vientos sin duda ellos son los causantes de la desgracia de seres sensibles y sin experiencia
Mis padres me lo advirtieron desde pequeño, que este mundo jamás va a cambiar a menos que muera, me enseñaron que nada es color de rosa y nada viene gratis
Siempre hay un pago a cambio de los favores, las amistades, los sentimientos pueda que al inicio no podamos ver ni distinguir la verdad de las mentiras y las mentiras de la verdad.
Pueda que la vida misma nos haya provisto de su manto protector y nos haya escondido de su cruel justicia y creemos erróneamente que podemos todo, y sin ayuda de un ser superior que nos eleve es imposible, así como la felicidad es felicidad a causa del dolor, porque ambas hermanas mellizas son necesarios para darle un pequeño toque de picardía a la vida de cada uno de nosotros.
Siento lástima por aquellos que solo conocen la desgracia y el dolor pero más pena me da de aquellos que solo han visto alegría y cosa buena, porque ellos son sin lugar a dudas las personas que más daño hacen a la humanidad.
Pero esta el otro extremo, personas que odian, y que por la educación burda que cada estado ofrece y por los problemas filosóficos mal encaminados llegan a ser enemigos de la humanidad.
Pero cada uno en su interior pose tanta maldad como amor pueden haber en todo el universo, y la única manera es encontrar a una de ellas primero, en la actualidad se idearon miles de métodos para que el ser humano no pueda encontrarse a uno mismo, la ideología de género, la lucha ateísta, el agnosticismo y la sutil mentira de una democracia de paz nos sumerge en un avance tecnológico e intelectual de la cual no somos parte ni el 1% de la población.
No debemos dejarnos gobernar por las minorías ni dejarnos encapsular en los moldes que la moral humana que bipolar e inconstante nos demanda así entonces como seres libre debemos escoger el amor y demás virtudes para que seamos libres de pensamiento y conozcamos la verdad absoluta.