"Después de mi tercer error"

Capítulo 2. Primer día de escuela

Me levanté a las 8 salí a correr como siempre y Regresé a las 9 para desayunar pero, ahora me tendría que arreglar para ir a la escuela y conocer nuevas amigas.
Me sentía nerviosa, subí al auto de mi padre Michael me puse él cinturón y Prendí la radio y me sorprendí al escuchar Bang Bang de Green Day y le subí volumen y empecé a cantar como loca y mi padre me grito:
-¿Podrías callarte y bajarle volumen?.- me miro tratando de contener la risa
-Espera viene la mejor parte-Grite riendome y haciendo muecas raras.
La canción había terminado así que decidí bajar él volumen, y mirar a la ventana.
A lo largo del camino tuvimos un silencio un poco incómodo.
Estaba tan sumida en mis pensamientos que no me había percatado de que ya habíamos llegado a la escuela, hasta que mi papa le subió a la música y lo mire con mala cara.
-Ya llegamos.
- No quiero ir ¿y si mejor me regreso a la casa y juego videojuegos o leo un libro?-Lo miré con cara divertida haciendo pucheros.
-No ya tienes que irte, vamos estarás bien-Me sonrió de lado y se despidió de mi.
-¡Gracias y adiós! Me baje del carro y comencé a caminar hacía mi escuela.
-¡Buena suerte Nora! Grito mi papa y se fue.
¡Santa mierda! No quería entrar estaba nerviosa eso de socializar no era lo mío.
Decidí entrar, la escuela era más grande que en la que iba antes y no lograba encontrar mi maldito salón.
Saque mi teléfono y llame a Misty.-¡Hola! ¡Que tal! ¿como te va en tu nueva escuela? Suena más emocionada que yo.
-Hola. Contesto secamente.
-¿Pasa algo? Me pregunta preocupada y sería.
-¡No es sólo que no encuentro mi maldito salón!-Le contestó enfadada, que no había notado que le había gritado.
-Oye, calmate preguntale a un maestro o a un chavo guapo que pase por ahí. Me contesta de manera divertida y se que está haciendo una cara  pervertida.
- ¡Hey! Adiós te hablo más tarde. Contestó amargamente soltando una carcajada
- Espe... No la deje terminar y colgué.
Busque un libro en mi teléfono y comencé a leer mientras caminaba, choque con un chico, tire mi teléfono y lo recoji.
- Lo... Lo siento. Tartamudeaba al hablar
- ¡Hey! No te preocupes debes ser nueva aquí.
- Uhm si. Volteo a verlo y noto que es guapo tiene su cabello negro despeinado, un ojo café claro y él otro amarillo, la playera de la ecuela está demasiado pegado a su cuerpo de adonis, se ve que a estado trabajando en esos músculos.
Y vaya que si...
- Eres linda, me encantan las chicas lindas y que se sonrojan-Me voltea a ver con su mirada de pervertido y muerde su labio inferior.
- Soy Jake por cierto ¿y tú eres?-  Me contesta divertido, mientras juega con la punta de su corbata roja.
- Emm No... Nora. Lo miro y le sonrió.
- ¿En que salón vas?
- En él D6 pero, no logro encontrarlo.
- Oh, ahí va mi hermana, ¡ven te llevo! Me agarra del brazo y me lleva hacia él salón.
Lo que provoca que un ligero cosquilleo por todo mi cuerpo, Jake lo nota y afloja sólo un poco su agarre y revuelve su cabello haciendo que luzca aún más atractivo.

El silencio fue incómodo mientras caminamos hasta que por fin llegamos al salón.
Por más raro que parecía no quería que se fuese, y quien no quiere un chico así, tiene unos ojos Preciosos, jamás había visto unos ojos tan hermosos.
-Gracias un gusto conocerte.- Repondo tímidamente.
- El gusto es mío.- Me guiña él ojo y me da un beso en la mejilla, lo que provoca un lijero sonrojo.
Veo que él maestro viene hacia acá y Jake me arrebata mi teléfono.
- ¡Hey! ¡Devuelvemelo!.- Alzo mi voz e intento arrebatarle él teléfono que resulta en vano
Alguno que otro curioso, se gira a verme.
¿qué no tienen mejores cosas que hacer?
El maestro me mira serio y alza la voz.
Haciendo que mis oídos quieran estallar.
- ¡Señorita debe ser nueva aquí pero, por favor no grite!
- Per... No me dejo terminar la frase, solo me tomo del brazo y me metió al salón.
Y ahora Jake tiene mi teléfono y esta sonriendo de oreja a oreja, burlandose de mi y ya estando dentro del salón él maestro no me permitirá salir para nada, si salgo me pondrán reporte por salir o me bajaran puntos.
- ¡Te veo en él recreo, en la cafetería! Me grita y le sacó la lengua como niña pequeña.
Siento algunas miradas detrás de mí y noto que varias chicas se encuentran burlándose, secreteandose entre sí o lamzandome miradas de desprecio de su parte.
Sonrió internamente porque conocí a un hombre demasiado guapo.
Pero, al instante sacudo esas ideas de mi cabeza y me concentró en lo idiota que es.
Si como no, nis vimis in li cifitirii.
Maldito idiota nose que pretende.
Te gusta y lo sabes, mi niña interior está corriendo y gritando su nombre en voz alta
Jake.
Sacudo mi cabeza de nuevo y quito aquel pensamiento estúpido que tuviera que ver con ese tal Jake y me siento hasta él frente al lado de la ventana esperando él recreo para poder recuperar mi maldito teléfono que me quito ese idiota.
¿qué no me pudo haber preguntado si quería comer con él? Aggh.
El profesor comienza a dar clase y una chica de cabello negro, y ojos color miel se me acerca.
-¡Hola! Veo que ya conociste al estúpido de mi hermano. Me sonríe y suelto una carcajada.
-Y veo que tú eres la hermana de ese estúpido. La miró y empezamos a reírnos, él maestro nos mira mal y nos callamos.
-Si, de hecho si, vaya veo que él maestro trae hoy un humor de perros. Me susurra al oído y trato de evitar reírme.
-Ya lo veo.
Conversamos toda la clase sin poner atención al estúpido profesor que aburrían sus clases con sólo mirarlo a la cara.
Suena él timbre y empezamos a salir y lo único que quiero es recuperar ese teléfono.
Cuando siento que alguien me tapa los ojos y noto que es Jake.