No juzgues

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No juzgues y hazte responsable. Nadie es responsable de los eventos que te acechan. Cada uno cumple con su parte del contrato. El hecho de que lo ignores; debido al verlo, no significa que no exista. Existe y es real. Cumple con tu parte en paz y vive feliz. No involucres a otros en tu dolor, porque a tu dolor mas te apegas y con el tiempo pasa a ser parte de ti. Se vuelve un habito difícil de despojarse de el. Mientras mas busques responsables, mas se te incrusta el dolor y mas te abraza el resentimiento, mas te apartas de los semejantes abriendo las puertas a la soledad.

No busques afuera lo que llevas adentro. En tu mundo interior están todas las respuestas. Buscalas y encuentralas. Afina tus oídos y escucharas. Quien trabaja tiene derecho al pan de cada día. Quien se empecina en ver para dar, tiene derecho a la verdad. La autentica verdad es la que emerge desde los abismos del inconsciente. Búscala en lo profundo y oscuro de tu interior. Conviértete en pescador de ideas, de mejoras, de perfección, de crecimiento y expansión. Tu eres el campo de experimentos, tu eres la herramienta y tu eres el artífice de tu destino. Nadie puede hacerlo por ti porque tu posees la llave de tu cerradura, tu la manejas y nadie mas. Tu eres la caja de herramientas y solo tu la sabes manejar porque fueron hechas a tu medida. Manejarlas forma parte de tu aprendizaje, de tu autoconocimiento, de tu crecimiento y perfeccionamiento. Has venido a este mundo con todo lo necesario para tu experimentación y la responsabilidad es tuya y de nadie mas. Los semejantes son los estímulos que te obligan a poner en juego tus habilidades. Claro que no res consciente de que las posees, por eso te sugiero que las busques. Quien busca encuentra, y quien encuentra es porque se lo merece. Quien se merece es porque a confiado en si mismo y ha transitado el camino, ha desgastado sus sandalias y ha continuado descalzo porque confía llegar a su meta. El que anda por senderos agrestes sin escatimar esfuerzos, es un rebelde sin causa. Es un rebelde porque lucha contra sus propias dificultades y no se resigna a la mediocridad. No deja para el karma la solución de sus errores porque tiene un precio muy caro, y acepta el desafió de remar contra viento y marea, porque sabe que es mejor trazar su propio destino que dejarse arrastrar por el azar y llegar a un final no deseado.

Cuanto mas te juzgues mas razones para condenarte encuentras. Cuanto mas indulgente eres contigo mismo, mas razones encuentras para perdonarte. El único perdón valido es el que te deja un sobresalto de vació por el momento y una sensación de espontanea libertad placentera.

No juzgues, no condenes, para no ser demasiado severo contigo mismo. Se comprensivo con los demás para no tener que soportar el peso de tu propia vara.

Ser amoroso trae una eterna recompensa de amor y paz, y se goza de luz y verdad.

Obras de mi abueloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora