Es un día normal en la Mansión. Sebastian ya me había despertado, vestido y llevado el té de cada mañana.
Mientras que caminamos por el pasillo hasta llegar a mi despacho Sebastian me habla sobre que tengo que hacer hoy.
-El día de hoy tiene clases de baile con la nueva maestra de danza y- interrumpí a Sebastian.
-sabes que no me gusta ningún tipo de baile. Se me hace una pérdida de tiempo.
Sebastian me abre la puerta de mi despacho y tomo asiento en mi silla de terciopelo.
-Aparte tengo varias cosas que ver de la compañía y sabes perfectamente que la compañía es lo primero.
-Lo se Bocchan pero...-es la primera vez que veo a Sebastian dudar en decirme algo.
-¿pero?
-¿Puedo ser sincero con usted?
¿Sincero? ¿Desde cuando el quiere serme sincero?
-Claro. Se directo.
-Bien. Me parece que hasta hoy usted es muy egoísta.
-vaya eso no es algo nuevo.
-¿usted leyó el libro de la Bella y la Bestia?
-Claro, mi madre gozaba leer de esa historia.
-Bueno usted está siendo como el príncipe: Egoísta y sin empatía. A usted le falta ser más como Bella: Bondadosa y Valiente.
-Claro que soy valiente- le respondí algo molesto. ¿Porque me está diciendo esto ahora?
-la valentía tiene muchas formas Bocchan. Su valentía es diferente a la de la historia. Por lo tanto haré un hechizo en usted tal y como lo hizo la hechicera de la historia- veo cómo termina esa frase sonriendo todo engreído.
-claro... un "hechizo". ¿Entonces me vas a convertir en la Bella? Ha! Deja de bromear desde temprano Sebastian; como ya te dije tengo cosas que hacer.
-Bueno, yo ya se lo advertí.
Veo como Sebastian sale de mi despacho.
¿Que clase de hechizo? ¿Los demonios pueden hacer ese tipo de hechizos?
Mejor seguiré con mi trabajo.Después de un rato trabajando oigo como tocan a la puerta de mi despacho.
-pase.
Sebastian entra con el carrito del lunch y me sirve en el escritorio un pastel muy pequeño de chocolate y una taza de leche con miel.
Tomo primero la taza con leche y antes de tomar un trago percibo un olor diferente al habitual.
-¿Tiene algo diferente?
-Le agregué una pizca de vainilla. Esperaba que le gustara.
Después de tomarme toda la leche y el mini postre (que esperaba tener más) me dieron unas inmensas ganas de dormir y poco a poco mis ojos se dieron cerrando hasta quedarme dormido enzima de mi escritorio.Siento una luz molesta en mi cara, el maldito sol.
Levantó la cara y veo una ventana.
¿Que rayos? ¿Donde estoy? ¿Porque estoy en una cama?
Me levanto de la cama y a mi lado derecho encuentro un espejo donde me deja apreciar el traje mugroso que traigo puesto.
¿Y está horrible ropa?
Busco una puerta para poder salir y ver dónde estoy y al encontrarla y salir veo un pueblo todo viejo y rústico, mujeres con vestidos largos y llenos de tierra, hombres con cubetas dando de comer al ganado, niños jugando en los charcos de lodo... ¿donde estaba? ¿Donde estaba Sebastian?
-ese maldito demonio... Sebastian! ¡¿Donde estás?!
Salgo de la cabaña donde dormía y busco a alguien que me pueda explicar donde me encuentro.
-oiga, disculpa! -me ignora una señora.
-Hey!- me pasa por alto un señor con bigote.
-¿que nadie me oye?
Estoy exhausto. Tengo hambre, no sé dónde estoy, nadie me hace caso y lo pero de todo ¿donde estaba Sebastian
-¿estas bien niño?- oigo como una voz chillona me habla por la espalda.
-¿a quien le dices ni- Elizabeth!
Me sorprende mucho al ver a Elizabeth en este lugar. ¿Que hacia aquí?
-¿como sabes que así me llamo?- me pregunta extrañada.
-eres mi prometida! Como no saber tu nombre.
Veo como Elizabeth se ataca de risa en mi cara. ¿Que tiene eso de gracioso?
-¿yo, tú prometida? Pero si ni te conozco.
-pero soy Ciel, ¡Ciel Phantomhive!
-si claro- me sonrie sarcásticamente.
-¿como el castillo abandonado en el bosque?
-¿Castillo?
-Si, allí se encuentra una bestia come almas~
-Sebastian...
-¿quien?
-no, nadie. ¿Me podrías decir cómo llegar allí?
Veo como Elizabeth saca una hoja y lo que se podría decir lápiz de su mandil y dibuja un especie de mapa.
-¿porque quieres ir? Te acabo de decir qué hay una bestia allí- me pregunta extrañada Elizabeth.
-No es una bestia...Es mi mayordomo.
Tomo el croquis que Elizabeth me dibujo y busco la salida al bosque.
ESTÁS LEYENDO
The Demond and the Lord
ФанфикImagínense la historia de la Bella y la Bestia combinada con Kuroshitsuji pero en ves de ser la misma historia cursi y amorosa está vez será intensa, diferente y con un sexy Demonio