Laberintos.
Me rompieron el corazón tantas veces que no me alcanzan los renglones para expresarlo y perdí más amistades de las que realmente tuve.
Pasé más momentos tristes que felices y sufrí más de lo que me amaron, aunque yo amé con toda mi alma.
Fuí el blanco de burlas, y también del destino cruel que puso las cartas equivocadas en el camino de un cordero de verdad, no de un lobo disfrazado.
Me enamoré de idiotas. Me dejaron. Lloré.
Y también fuí una idiota, porque pensé que alguien más me iba a dar el valor que me corresponde darme a mí misma.
Creí que cambiando mi físico todo sería distinto.
Pensé que mágicamente, cuando creciera, mi vida cambiaría.
Me convertí en una soñadora, anhelando cosas algo imposibles... Hasta que la realidad me golpeó tan fuerte que me quebró.
Y ahora sigo un camino errante, buscandole a una salida a este laberinto interminable de dudas y pasos en falso que solo me metí por que no tuve el valor de escalar las montañas que realmente quería alcanzar.
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Hojas en blanco.
Short StoryLa vida a veces golpea tan duro que sus secuelas caen como palabras sobre hojas en blanco.