Interrumpiendo Bodas

La Boda

-¿¡Camus se casa mañana?!- Dijo un Milo sorprendido. Al llegar de vuelta al Santuario no se esperaba para nada esa noticia.

-Emmm... si, bueno... Milo. Verás él se casará con Surt... - Hablo nervioso el mejor amigo de Escorpio.

Esa fue la respuesta que lo sacó de sus casillas. Su gran Amor, su tesoro más preciado, SU Camus. Su Camus se casaría y lo haría con Surt. Nada menos que con ese pedazo de idiota.

-¡NO ES CIERTO! ¡Dímelo Aioria! ¡Camus no se casará! ¡Dilo! ¡Anda DILO!

-Lo siento Milo... -Dijo el guardián de Leo cabizbajo.

-NO, no, no... mi Camus no... -soltó un fuerte golpe en la mesa con lágrimas en los ojos.

Era pasada ya la media noche y Milo había llegado minutos atrás al Santuario terminando una misión que lo había mantenido ocupado unos cuantos meses.

Subió a su templo a dejar sus cosas y después de ello, ir a molestar a su entrañable amigo de Leo, al cual le había preparado un regalo, y como todavía tenía otro huso horario, y el aburrimiento lo dominaba, no encontró otra distracción más razonable.

Encontró a todo el Santuario dormido menos en Virgo y en Leo, Shaka le dedico una sonrisa triste a modo de saludo, lo cual al principio lo desconcertó porque ni siquiera le importaba si él pasaba por el templo de Virgo, así que en Leo, donde se encontraban ahora, preguntó juguetón que le pasaba a Shaka, la respuesta jamás lo olvidaría.

-Debo hacer algo...-Se agarró la cabeza después de llorar un rato mientras su amigo le palmeaba la espalda.

- Y lo debes de hacer pronto, Milo.

~-•-~

En la siguiente mañana, Camus se levantó de su cama en la madrugada, estaba nervioso por ese día y también porque soñó con Milo donde el de Escorpio le repetía que lo amaba.

Y eso lo hizo dudar sobre si...

Sacudió la cabeza negativamente, debía fidelidad a Surt y a sus cuidados en toda esa temporada.

Mientras que Milo... Él lo dejó olvidado y abandonado sin explicación alguna y partió sin un retorno fijo.

Sin embargo, presentía que ese día pasaría algo inolvidable.

No esperó mucho tiempo y fue a desayunar. Todavía tenía tiempo antes de su boda, la cual empezaría a media mañana en el coliseo. Tomó su café divagando en el tiempo y recordando a cierto caballero dorado con una sonrisa hermosa y pelo ondulado largo color azul...

~-•-~

Milo ya llegaba a Leo, repasaba una vez más su plan.

-Aioria ¿Estás despierto?- Ingreso al templo que custodiaba.

-No... -Dijo somnoliento abrazando su almohada.

-¡¿Cómo puedes dormir cuándo tu amigo esta a punto de morir?!

-Ash... Vale, ya voy ¿hiciste lo que te pedí?

-Si, ya fui a Acuario...

- Bien Milo, así influyes a Camus a dudar de Surt - le guiñó el ojo- Cuando alguien lee lo que escribo se queda impactado ;)

Aioria escribió un texto donde ponía a Surt como el más malo de todos los tiempos, para que Milo lo lea mientras dormía, así ponía a Camus y a su inconciente contrariado para que se volcara a favor del bicho y el acuariano dudará seriamente de casarse.

-De hecho... perdí tu hoja... Lo siento.

-¡¿Qué, Qué?! ¡Mendigo bicho! ¡Pasé una hora en escribirlo! Bueno, no importa, pero ¿Entonces qué le dijiste mientras él dormía?