Perseguido ||Erick B. Colón|| #CNCOINFINITEAWARDS2018

Capítulo 13

"Boda trágica"

A la mañana siguiente, Arianna y Alexia estaban semtadas en una mesa de la cafetería, riendose de algo que veian de un teléfono mientras Tomás estaba estornudsndo de vez en cuando debido a que habia atrapado un resfriado despues del chapuzon que se dio en la playa.

-¡Debiste haberte visto!- le dijo Alexia a Tomás mientras se reía

Al parecer veian la grabacion que hicieron ese día.

-Debiste haberme dicho que no sabias nadar, lo hubiera entendido- hablo Ariana dirigiendose a Tomás. Ella aun tenia la sonrisa burlona producto del video, en sus labios

-Sabía que esto pasaria...- susurro Tomás

A pesar de que Tomás no me parecia una persona tan inteligente como para ser capaz de planear algo malvado, no podia perderlo de vista y mucho menos despues de que escuchará, si es que lo hizo, que soy EBC. Mejor dicho, nimguno de los dos podiamos perdernos de vista pues el me miraba con cara de pocos amigos.

- ¿Qué me miras tanto?- le pregunte- ¿Acasi yo tengo la culoa de que te ahogaras?

Me fulminó con la mirada

- ¡Calmense!- grito Alexia- si siguen asi, Arianna ni se quedara con ninguno de los dos

Arianna se sonrojo y le dio un golpecito en el brazo a su amiga

***

Ya eran las seis de la tarde, ya no habia clientes y ya tenia ganas de ir a mi deoartamento a descansar.
Justo cuando yo me estaba sacando el delantal de trabajo llegó un grupo de policías.

《Ya valí》pensé

- ¿Cómo estas, muchacho?- hablo uno de los policías mientras se acercaba

Aunque yo me encontraba de espaldas igual podia sentir sus pasos.

Rápido tomé una revista, la abri y la coloque frente a mi de modo que me cubriera el rostro a excepción de los ojos. Luego me volvi hacia él.

- Bien, estoy bien- dije y dirigi mi vista hacia la revista.

- Me alegro, danos cinco cafés- habló y yo asentí. Me di la vuelta para preparar los cafés- ¿Qué lees? Dejame ver- pidio

- Tenga- dije y aun de espaldas le di la revista

Prepare los cafés y fui a dejarlos sobre el mostrador frente a aquel policía. Yo mantenia mi rostro mirando hacia abajo.

- Ten- me dijo al mismo tiempo en que me daba el dinero, el cual yo tomé con dificultad ya que no podia mirarlo directamente.

Guardé el dinero en la caja registradora, saqué dos monedas y se las dí.

- Su cambio- me di la vuelta rápidamente y me aceruq a una de las licuadoras actuando como si hiciera algo

-¡Oye, chico?... un momento- hablo el policía

-¿Si?- pregunté mientras me cubria un poco el rostro con mi delantal

- ¿Por qué me das cambio? Te pedí cinco cafés de sesenta centavos y te pague con tres billetes de un dólar- explicó