Charla con la Abuela

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''En otro lugar.

Estaban Rose y Travis caminando rumbo hacía la casa de la chica, y durante el camino todo fue tranquilo, bueno excepto por algunas bromas y juegos tontos de parte de ambos para pasar el rato, pero sin más llegaron a su destino despidiéndose rápidamente, para que el joven bestia se dirigiera a su hogar. Y una vez que Rose entro en su casa subió directo a su habitación, para luego salir a la terraza a contemplar el cielo y a pensar un poco.

Pensamientos de Rose

Semillas de calabazas, bien hecho Rose era tu oportunidad de poder hablar con Howk y la arruinaste por completo, pero lo que aun no entiendo es porque me puse tan nerviosa digo no es como si fuera la primera vez que hablara con el pero de repente fue como si perdiera el control sobre mi misma, pero peor porque me siento tan mal por esta situación, es como si mi corazón se quebrara en mil trozos como si fuera una zapatilla hecha del más fino cristal, pero aun no sé el porqué de ello...

Fin del pensamiento

Después de estar un rato más afuera, la joven cenicienta si dispone ir a su habitación a descansar ya que ya se había hecho algo tarde.

Al día siguiente la joven se levantó temprano y se fue a la escuela ya que estaba decidida a encontrar a Howk y resolver ese pequeño problema de un vez por todas, y de paso intentar averiguar que era ese sentimiento que la estaba comenzando a mortificar de cierta manera.

Pero nada salió como ella esperaba ya que ese día no pudo hablar con el chico, y mucho

menos lo pudo encontrar solo en algún momento, era como si el supiera que ella esperaba ese momento, pero nunca llego o él no se lo permitió, y así fueron pasando las horas, el día termino era momento de volver a casa, y había fracasado rotundamente en su intento de hablar con el peli-azul. Y así también fueron pasando los días e in ninguna oportunidad de hacerlo ya que este la esquivaba de una forma sumamente exitosa, lo cual se estaba convirtiendo en una situación sumamente frustrante para la rubia, pero aun así ella no se rendiría ya que estaba decidida a saber que

Le estaba pasando a su amigo de una vez por todas. Pero por el momento ya no podía seguir mortificándose por eso ya que ella debía dirigirse al Castillo Cenicienta para prepararse para el baile de esa noche, porque si como estuvo tanto tiempo tratando de hablar con su amigo si éxito alguno, los días pasaron en un abrir y cerrar de ojos y sin darse cuenta ya había llegado la noche del baile.

En el castillo cenicienta

Se encontraba la joven rubia en su habitación terminando de arreglándose para el baile, cuando escucha que alguien toca su puerta.

--¿Rose querida puedo pasar?-- preguntó su abuela

--Claro abuela pasa-- contesto la joven

-- Solo he venido a ver como estabas ya que pronto será momento de irnos-- dijo la rubia mayor mientras entraba a la habitación

--Tranquila abuela ya casi estoy lista solo debo ponerme lo zapatos pero...--- dijo algo dudosa

--¿Sucede algo querida?-- preguntó su abuela

--Es solo que no puedo decidir que zapatos usar-- dijo la chica con una sonrisa nerviosa en su rostro

--Es que nunca cambiaras querida-- dijo su abuela con resignación en su rostro

-- Es que hay tantos-- respondió su nieta

--Bueno ya se está haciendo tarde y ya tenemos que irnos así que tendremos que volver a lo tradicional-- dijo su abuela

--¿Volver a lo tradicional? ¿A qué te refieres abuela?..-- preguntó la chica algo confundida

--A esto querida-- dijo su abuela

En eso la rubia mayor sacó su varita invocando su magia y haciendo aparecer un par de zapatillas de cristal, las cuales le entrego a su nieta.

--Están hermosas abuela gracias-- dijo la menor emocionada

--De nada querida, además ya es momento de que tengas tus propias zapatillas de cristal-- dijo la mayor

--Si creo que sí...-- dijo la menor

--Rose querida que te pasa, y no creo que sea por los zapatos-- dijo seria su abuela

--No es nada abuela-- respondió

--Vamos Rose no quieras tratar de engañarme sé que algo te está pasando-- le reprochó la mayor

--Creo que tienes razón abuela, bien entonces te contaré-- dijo la pequeña cenicienta algo triste

(Bueno para no aburrirlos con una historia que ya conoces omitiremos eso)

Y así Rose le contó todo a su abuela sin omitir un solo detalle

--Y eso es lo que ha estado pasando abuela-- dijo la menor algo triste

--Bueno querida talvez no tenga una explicación del porque el joven Howk te esté evitando, pero talvez si para ese malestar tuyo-- dijo la cenicienta mayor

--En serio abuela y cuál podría ser-- exclamó la más joven

--Bueno querida no te ha a pensar que talvez la razón por el que sientas que tu corazón se quiebra por su indiferencia sea por algo más-- dijo su abuela

--¿Algo como que abuela?-- preguntó

--Amor talvez-- confesó

--Eso no puede ser abuela él y yo solo somos amigos...-- susurró la joven

--Nada es imposible querida además ese sentimiento pudo estar ahí desde hace mucho, solo que no lo habías notado-- aclaró la anciana mientras abrazaba a su nieta

--Pero aun así...-- susurró la menor mientras correspondía el abrazo

-- Solo tienes que buscar dentro de ti, y escuchar a tu corazón, ahora vamos que el carruaje nos espera-- dijo su abuela*

 Que les pareció...?

Por cierto esta historia está próxima a culminar así que comenzaré otro proyecto, pero no me decido sobre cuál que dicen ustedes, les parece uno sobre: Eldarya Corazón de melón o quieren otro sobre Regal Academy...?


Revelando SentimientosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora