Prefacio

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Ves es el océano en sus ojos.

El Encanto en su sonrisa,

pero no vez detrás de su silueta

Las promesas de una mentira.

¿Quién podría decir que una chica como Ámbar Smith podría vivir entre las sombras?

Simón pudo.

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Ámbar Smith es hermosa. Maravillosamente lo es, con su cabello dorado tan inadmisible como el sol, ojos abismales como el cielo que se reflejan en el océano y figura totalmente ligera y delicada haciendo añoranza a una flor. Pero no se confundan con su inocente exterior. Ámbar tiene las aptitudes de un leopardo, en la manera que te observa como si fueras su presa.

Ella no era inocente, para nada. Pero era en la manera que su boca sonreía y sus ojos te analizaban que te hacían preguntar ¿acaso era esta chica real?

Simón Álvarez es la definición exacta de un chico bueno. Sonriente todo el tiempo con sus ojos brillando ante cualquier persona, alegrando a todos a su alrededor en cualquier momento. El está enamorado, de una chica de ojos profundos, cabello marrón y brillantes sueños. El haría lo que sea para protegerla.

Simón puede ver la amenaza, las sombras ocultas en los ojos de ámbar, él lo puede ver cuando ella observa la chica de sus brillantes sueños. Entonces, cuando la maldad empieza a flotar alrededor de luna simón no puede evitar meterse en el camino de ámbar.

Ámbar lo ve como un estorbo.

Simón la ve como una rosa con espinas.

Pero, ¿qué pasa cuando secretos son descubiertos y el pasado es introducido al presente? Corazones serán rotos, apuestas serán hechas y nuevos sentimientos aparecerán en esta historia hasta que no quede nada.

Entre las sombras → Simbar ←Donde viven las historias. Descúbrelo ahora