La penumbra de mis sueños

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Relatos cortos basados en mis aventuras en el mundo de los sueños... Espero que les guste, y de antemano les agradezco sus comentarios y sugerencias.

AH CLARO... GRACIAS A LOS QUE ME SIGUEN =) TODO MI CARIÑO PARA USTEDES

CAP. 1

LA SOLITARIA SARA

Sara estaba sentada en el borde de la ventana, con su cara pegada al cristal frío, era testigo de las gotas que rompían la delicada calma de aquel día oscuro.

El viento acariciaba con suavidad las hojas de los arboles que rodeaban el claro donde sus padres construyeron con tanto amor la casa de 3 pisos que ahora era solo un museo donde los recuerdos y el dolor eran la exhibición diaria de sus vida en soledad.

Desde hace 2 años esa era su única compañera, la soledad... 

Era el día de su cumpleaños número 20 y también el segundo aniversario de la muerte de sus padres y su pequeño hermano.

No sabía si su mente tenía un defecto o si el dolor la había afectado tanto que ahora era incapaz de sentirlo... Ya no le dolía pensar en ellos, hasta sonreía al recordar las travesuras de su hermano.

Decidió que ya era hora de volver a poner los pies en tierra. Se puso de pie sin dejar de ver entre los árboles, había algo allí que llamaba su atención, un roble inmenso que se encontraba a unos 10 metros en el jardín, era ancho, así que una persona fácilmente podría esconderse detrás de el... 

Y allí estaba, una cabeza se asomaba detrás del tronco, una tez pálida, cabello negro. La muchacha trato de aclarar sus ojos para distinguir algún otro rasgo de la persona que veía a través del cristal mojado, pero por la intensidad de la lluvia era difícil ver más que eso.

Así que se alejo de la ventana y fue directo a la puerta, salió al porche y dirigiéndose al sujeto le pregunto casi a gritos.

-Oiga quien es usted? Que hace allí?

El sujeto salió por completo de la sombra del roble y comenzó a caminar hacia la casa. Sara se congelo, no de miedo, sino de sorpresa. El muchacho caminaba lentamente, era alto, y hasta donde la lluvia la dejaba ver, era muy bien parecido, fácilmente confundible con un modelo de revistas europeas. Sus ropas no estaban muy acordes con el clima. Al notar que ya estaba cerca de las escaleras del porche le volvió a preguntar, esta vez en un tono más bajo.

-Quien es usted?

Los ojos del extraño estaban cubiertos solo un poco por el cabello mojado, subió los escalones y se sacudió el agua de su rostro. Para el asombro de Sara, cuando el muchacho se aparto el cabello y la miro de frente, casi pierde el equilibrio, su boca no reaccionaba al grito que su mente le imploraba. Sus piernas querían salir corriendo, pero su mente no trabajaba en las órdenes de su cuerpo. Estaba paralizada viendo los ojos rojos de aquel extraño que quien sabe hace cuanto tiempo la acechaba.

Sus pensamientos se dividieron, eran como varias pantallas con diferentes películas, todas en una sola habitación. Una mostraba al muchacho hablando despreocupadamente, diciéndole que no se asustara, eran solo lentillas y que venía de una fiesta de disfraces, eso explicaría la ropa también. Otra mostraba la mano del muchacho sujetando un cuchillo como en las películas de terror. La tercera era algo estúpido, un ángel que venía con un mensaje de sus padres.

El muchacho se acerco a Sara y le dijo.

-me entendiste?

No sabía cuánto tiempo había pasado, ignoraba por completo lo que él le había dicho antes. Estaba muy inmersa en su imaginación. Trataría de pedir que repitiera todo de la mejor manera.

-Disculpa pero creo que no te entendí, nada para ser exacta.

-Te dije que mi nombre es Jason, soy un demonio y me han enviado a buscarte.

-Un demonio dijiste? Me vas a disculpar pero creo que has pasado mucho tiempo bajo la lluvia y te ha afectado.

-No Sara, lo que te digo es cierto. Me han enviado a buscarte porque sencillamente ya no tienes nada que hacer aquí.

-Supongamos que te creo. Si ya no tengo nada que hacer en este mundo, no debería morir y listo? Porque me vendría a buscar un demonio? Y de donde sacaste eso que no tengo nada que hacer?

-Ya no tienes nada que te ate a esta vida, a esta casa. La muerte es un desperdicio. Quien más podría venir a buscarte? Un ángel del cielo? Ambos sabemos que tú no crees en esas cosas. Y por último, tienes que venir conmigo para entrenarte en nuestro mundo oscuro y seas también demonio.

-Osea que porque ya no tengo a nadie en el mundo, tú me reclutaras a un ejército de demonios? Esto me parece una tontería.

-Sí, es así de sencillo.

Sara no sabía si reír, llorar, echarse a correr, insultar a Jason… pero había otra idea en su mente. Creer, aceptar y huir de esa vacía vida que llevaba hasta ahora.

Un trueno estallo en cielo y de un salto Sara se despertó.

Todo había sido un estúpido sueño, el más real de todos los sueños.

La penumbra de mis sueñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora