Canterlot #Wattys2018

21. Radical.

Blue

       Estaba algo cansada, después de haber conocido a los hermanos de Zac, había decidido tratar de hablar con él, pero todo resulto de una forma diferente a lo que esperaba. Estaba algo confundida, pues Alex me había besado y luego Zac me había dicho que era de él como lo hacía cuando estaba en el "pacto".  Sin embargo esta vez había sido muy diferente.

- Suéltame- dije mirandolo fijo. Estaba muy cerca de mí y podía sentir su exquisito aroma. Dios... ¿Por que todos los vampiros que me rodean son sexys? Tragué fuerte al ver sus ojos.

- Recuerdalo, no importa el tiempo o con quien andes... Siempre habrá algo que te atraiga a mí-  dijo. Sus labios eran tan perfectos. No, no podía querer besarlo. Es imposible. Primero beso a Alex ¿Y ahora quiero besar a Parker? ¡Demonios! ¡No! Detesto a Zac, no puedo sentir atracción hacía él. Me solté bruscamente de su agarre y volví a la casa.

-¿Estas bien pequeña?-pregunto Alex mirándome cuando entre a la casa. Asentí con una sonrisa forzada y me senté junto a él.

- ¿Mi hermano sigue afuera?- me pregunto Jade, yo simplemente asentí y mire mis dedos.

  Había algo extraño. Realmente sentía atracción por Zac, pero también por Alex. Tengo que ponerme en orden.

- Con el permiso, voy a mi habitación- dije poniendome de pié - Un gusto en conocerlos chicos- dije sonriendo a los hermanos de Zac. Ellos sonrieron de vuelta. Subí rapidamente a la habitación encontrandome con Parker acostado sobre mi cama.

-¿¡Que rayos haces Parker!?- dije exaltada. Él solto un par de risas burlonas y me observo.

- Ven - dio palmadas a un lado de él en la cama. Negué.

-¿Que quieres?- pregunte cruzandome de brazos.

- No seas tan testaruda conmigo Blue - dijo con una voz un tanto ¿Seductora?¿Que diablos pretende?

- Zac....¿Que estas buscando?-pregunté algo nerviosa. Él se puso de pié frente a mi con rapidez, provocandome susto.

- No quiero que me detestes Blue - Acarició mi mejilla.

- ¿Que esta pasando?- pregunte rara. Me sentía extraña y él estaba muy raro conmigo.

- Hay algo dentro de mí que te detesta como tú a mí.- sonrio y luego volvio a ponerse serio.

- Me odias - murmuré bajando la vista. Siempre e entendido que Zac me a odiado desde el primer momento en el que me vio. A actuado frío, molesto y seco conmigo sin yo darle razones.

- No, no te odio Blue.- dijo dejandome sorprendida. - Eres una chica tan desesperante- dijo tomandome de la barbilla y haciendo que lo mirara. Estaba nerviosa y mis manos comenzaban a sudar. Se acerco a mi rostro y cerró sus ojos respirando ondo cerca de mí. Cómo si aspirara mi olor.

- Adoro tu olor - susurró a mi oído haciendo que mi piel se erizara.

-Za-Zac....-

- Me gusta tu sangre....-

- Eh..- se acerco más a mí. Podía sentir su nariz rosando con la piel de mi cuello.

- Me fascina... Todo de tí....- abrí mis ojos por completo. Tenía que ser una broma. Zac apretó mi cintura y me pegó más a él haciendo que sus labios rozarán con la piel de mi cuello. Planto un pequeño beso en mi cuello y me mordió. Sentía cómo me delibitaba pero de un segundo a otro me dejo de lado y me observo con culpa.

- Alejate Zac - se acerco a mi y sus ojos se tornaron rojos. Me observo fijo y caí al suelo con mi vista nublada.

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  Sentí como tocaban mi rostro con delicadeza haciendo que me despertara. Los abrí y me encontre con una gran sonrisa de parte de Alex.

-Hola nena ¿Como te encuentras?- acarició mi mejilla. Me senté sobre la cama. ¿Que me había sucedido?

- Bien, tengo un poco de dolor de cabeza pero estoy bien - dije dandole una sonrisa. Él se acerco a mí y me abrazo.

- Me alegra que estes bien pequeña- se separó de mí y se puso de pié buscando algo en uno de los cajones de la habitación.

-¿Que haces Alex?- pregunte curiosa. Él se giro con una cajita color azul cielo y me la entrego.

-Ten,un regalito- dijo sonriendo. Lo mire expectante y abrí la cajita encontrandome con unos aretes de diamante pequeños y delicados.

-¡Oh por Dios! Que hermosos estan Alex-dije mirando los aretes y luego mirando a Alex. Él se encogió de hombros con su sonrisa.

- Lo mejor para la mejor- dijo acariciando mi mejilla. Este chico iba a matarme. Rápidamente le agradecí y me los puse de inmediato.

- Se te ven muy lindos- dijo mientras me tomaba de la mano para llevarme abajo. Fuimos hasta la cocina mientras que Alex limpiaba unas copas,yo sacaba las bolsas de sangre. Se acerco hasta mi con las copas mientras que yo las llenaba con la sangre. Me entrego una y bebimos.

- Pequeña, tengo que salir... Voy a ir a Canterlot,te quedas en la casa. Si necesitas algo ve con alguno de los hermanos de Zac- dijo terminando de beberse la sangre y poniendose de pié para dejar la copa sobre la mesa.

-¿Y para que vas?- lo observe y bebí un poco más de sangre.

- Unos asuntos pendientes con Spencer- sonrio y se acerco a mí para besar mi mejilla.

- Vale, ve con cuidado - dije yo. Él rio y salio de la casa.

       Decidí servirme un poco más de sangre y dirigirme a mi cuarto. Estaba algo cansada y tenía mucho dolor de cabeza. Solo quería descansar. Cerré mis ojos y quede rendida.