Emily POV
-¡Que ya voy!-le grité a mi madre que gritaba como loca desde el primer piso; apurándome.
Bajé las escaleras con mi maleta en mano... Así es, maleta. ¿Por qué? Pues simple, me iré de viaje ¡Yupi! Está bien, siendo sincera, hace una semana ya que salí del colegio, estoy en vacaciones de verano y mis padres no encontraron nada mejor que llevarme de vacaciones donde mis abuelos maternos, no es que me caigan mal, al contrario, son muy atentos conmigo, incluso podría decir que más que mis padres... Pero me habían arruinado mis planes; dormir, comer, andar en pijama todo el día y dormir más... En pocas palabras; invernar en verano. Pero lamentablemente mis planes fueron arruinados, mis abuelos son de ese tipo de personas que siempre tiene alguna tarea para ti, y a pesar de que sean "ancianos" son más activos que uno mismo.
-Aquí tienes, cariño-mencionó mi madre mientras me extendía un sándwich junto con una soda.
-Gracias mamá-murmuré.
-Los abuelos deben de estar esperándote-tomó mi maleta y se dirigió con ella al auto-Te dije que no volvieras a ver la saga de Crepúsculo tan tarde-me reprendió.
-Ya estoy aquí, con los ojos abiertos, no tanto, pero da igual. No es mi culpa no tener un vampiro y un hombre lobo sexy a mi lado-toqué mi pecho con exageración.
-Algún día, hija-murmuró.
-Emily-me llamó mi padre.
-¿Si?-lo miré.
-Por favor, que no se te ocurra bailar en el tejado.
-Ah-le sonreí-Lo tendré en mente, no quiero volver a fracturarme el brazo-dije mientras recordaba ese día... Difícil de olvidar. Tommy, el gatito negro con una mancha blanca en su ojo izquierdo se había asustado porque había pasado la aspiradora en la pieza, y digamos que le pasé a llevar la cola... Accidentalmente... Y me vi obligada a bajarlo del techo, y pues justo recibí una llamada y empezó a sonar una canción muy pegadiza, me puse a saltar y bailar, está de más decir que resbalé en unas tejas y me caí, fracturándome el brazo izquierdo.
-Ya, ¿Todo listo?-cuestionó mi madre-Ya nos vamos.
-Si-respondimos mi padre y yo al unísono.
Me apoyé en la ventanilla terminándome en sándwich, he de admitir que mientras más nos acercábamos a la residencia de mis abuelos, más hermoso se tornaba el paisaje... El sur; lleno de vegetación única.
Tomé mi teléfono con mis audífonos, coloqué música, me acomodé en el asiento y cerré mis ojos. Mi madre tenía razón, la saga de Crepúsculo me quitó más de la mitad de la noche.
Sentí como mi cuerpo se relajó y caí en un profundo sueño.
-Despierta, princesa, hemos llegado-dijo papá.
-Mmmh-me estiré.
-¡Mi niña!-escuché no muy lejos una voz muy conocida.
Salí del auto y abracé a mi abuela.
-Mira que grande estás-dijo observándome de arriba hacia abajo.
-Rose... Por favor no le des falsas ilusiones, lo enana no se le quitará-escuche una voz a mi lado.
-¿Qué hay? Viejo-sonreí de lado, odia que le digan así.
-¿Viejo?-me miró con ojos abiertos-Estoy en mejor estado que tu padre-rio.
-Suegro... Ya supérelo-comentó papá.
-Papá, lamento la rapidez y todo, pero Gabe y yo debemos irnos-dijo mi madre.

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El Bosque
RandomEmily Thompson ha pasado por muchos casos desfavorables a su corta edad de 16 años... Pero lo peor llega cuando sus padres la dejan con sus abuelos por las vacaciones de verano. Emily descubrirá el secreto de su propia vida y pasará por alto todas l...