Prólogo

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Se me cayó el teatro...

Se me cayó el teatro, la mascara, la mentira que había creado, que me había inventado al decir que estaba bien, que la había olvida y superado por completo, que podía volver a empezar sin ningún problema y seguir adelante sin necesidad de voltear atrás.

Llegue a un punto de mi vida en el que me sentía tan bien que eso pensé, que estaba bien, que nada podía detenerme de ahora en adelante, que había logrado estar con esa persona a la cual mucho le insistí para que estuviera conmigo.
Llegue a un punto en mi vida en el que no veía para los lados al hacer las cosas porque pensé que todo lo que estaba haciendo era excelente y hasta llegue a decir muchas veces que estaba 100% segura de lo que quería y hacía. Ahí estuvo el error, no me di tiempo de analizarme a mí misma, no me di tiempo de sanar heridas y de pensar en serio que era lo que en realidad quería para seguir adelante.

Al estar sola en mi habitación me di cuenta de que una vez más me equivoque, de que cometí un error grande al no detenerme y ver la cosas como en realidad estaban pasando. Involucre otra persona a mi vida sin haber sanado heridas de otra, involucre a una persona tan maravillosa que sé, que si me lo propongo y me sano por completo me puedo enamorar fácilmente de ella. Pero ahora como estoy me siento tan bloqueada, llegué a un callejón sin salida y no se si regresar o trepar esta pared inmensa que se a puesto en mi camino. Si regreso la lastimaré y eso es lo que menos quiero porque no se lo merece, a estado conmigo poco tiempo pero la conozco lo suficientemente para saber que es una persona increíble y de sentimientos puros y no, no quiero eso, no quiero dar la vuelta y lastimarla y volver a caer en esa misma agonía en la que estaba tiempo atrás, no quiero morir llorando en una cama por una persona que solo me lastimo y jugo conmigo a pesar de que me mostré ante ella sin armas ni escudos, no quiero eso para mi, no quiero dejar mi dignidad a un lado solo por ella. Trepar esta pared que se interpone en mi camino significa sufrir un poco, cansarme en el ascenso pero se que al lograrlo seré recompensada de la mejor manera porque si trepó cada bloque de esta larga pared abra valido la pena ya cuando este en la cima.

¿Saben cual es el problema de que tome una decisión, aun viendo que la decisión correcta esta ante mis ojos y no hay necesidad de pensar tanto?

En problema está en que tanto muchas personas como yo, tienen miedo a lo desconocido, tienen miedo de ver que hay del otro lado del muro, tienen miedo de que lo que se encuentren no sepan como enfrentarlo, así sea bueno lo que se encuentren existe ese miedo, por eso se hace más fácil regresar y privarse de una felicidad que está ahí mismo, al otro lado de la pared, que luchar por ella y gozarla pero vemos ese obstáculo tan grande que regresamos al mismo punto y volvemos a lo mismo, a lo que nos hace daño, nos hunde y nos destroza...

Historia de una chica cualquiera Donde viven las historias. Descúbrelo ahora