Título: Valentine's Day
Personajes: Dean Winchester
Aclaraciones: Jess está viva. Dean y Lena son mejores amigos. Dean, Sam y Lena son cazadores. La idea me vino del 5x14 pero no contiene ningún spoiler... creo.
***
14 de febrero. Día en que mostramos el amor y cariño que sentimos por otras personas. Un día especial y esperado por muchos. Por alguna razón desconocida, el día que le da la fuerza a ciertas personas de declararsele a alguien (patético). En esta fecha podemos encontrarnos con diferentes tipos de personas. Por este lado tenemos a las parejitas felices, que no dudan en restregarte su perfecto amor, *cof, cof* Sam y Jess *cof, cof*. Por este otro lado podemos encontrar a los freaks, los nerds, los vírgenes que no salen, normalmente adictos a vídeo juegos. En el grupito de acá vemos a los tipos como Dean Winchester, deseosos de que este día llegue, salir con la primera chica que vean en un bar y ''celebrar, celebrar, celebrar'' y si, hablo de coito. Por ultimo pero no menos importante, donde pertenezco yo, los que vemos esta fecha algo innecesaria. ¡Por favor! Como si no pudieras demostrar tu cariño otros días, no entiendo porque imponen esa costumbre de que ese día sea especial, digo, todo lo que haces ese día puedes hacerlo cuando quieras, les informo. Pero no, les encanta torturarse pensando en que regalar y pensar en que recibirán.
Bueno, lamentablemente, ese día - el tan odiado y para nada deseado por mi parte día de San Valentín) es hoy. Ahora solo estaba a la espera de que Sam y Jess salgan a cenar, Dean vaya a enrollarse con muchas zorras, digo, chicas, para poder quedarme en el motel investigando sobre un nuevo caso y atascarme de pizza, oh deliciosa pizza.
—¿No se te hizo tarde ya?—pregunté sin levantar la vista de mi portátil.
—¿De qué hablas?—La confusión se hizo presente en la voz de Dean.
Suspiré y revolé los ojos en su dirección.
—Vamos, se que quieres irte a un bar, conseguirte a unas cuantas chicas y ''celebrar a lo grande.''— Hice comillas imaginarias con mis dedos sin darme cuenta del tono forzado con el que había dicho eso.—Ve, nos vemos mañana.
Me miró y frunció el ceño.
—Creo que pasaré de este día.
Paré en seco de hacer lo que hacía y volví a mirarlo, su vista en los papeles arriba de la mesa con mas información sobre las victimas de los asesinatos.
—¿Dean Winchester se saltará un 14 de febrero?—pregunté con incredulidad, a lo que el rubio contestó encogiéndose de hombros, restándole importancia.—Dean.— Solté una pequeña risa. —Es tu fecha favorita del año, la llamas ''Navidad sin ataduras.'' ¿Recuerdas?
—Bueno, Lena, tal vez hoy no tengo ganas.—dijo cansado... o cabreado.— No tengo por qué darte explicaciones.
Su tono fue duro por lo que fruncí el ceño disgustada, si no quería hablar, bien, pero no tenía que ser así de grosero.
—Es cuando el perro no come, cuando sabes que algo anda muy mal— murmuré pero al parecer me escuchó, por lo que antes de que me contestara, salí de la habitación que compartíamos en el motel.
***
Había salido hace unos 40 minutos del motel, pues el plan de la pizza seguía en pie; de regreso me pare en una licorería y compré algunas cervezas y una botella de tequila. No sabía si el hecho de que Dean pasara de San Valentín era bueno o no. Es decir, me alegraba de sobremanera que no se haya ido a enrollar con alguna zorra de por ahí, pues aunque tratase de negarlo, hiciese lo que hiciese, no habría podido dejar de pensar en él toda la noche y lo que estaba haciendo. Porque sí, Dean me gustaba. Pero por otro lado - el lado que me inquieta - es lo intimidante que podía llegar a ser el estar a solas con Dean.
Negué levemente con la cabeza y suspiré antes de entrar de nuevo a esa habitación.
Nuestras miradas se volvieron a encontrar.
—Traje pizza.—dije sonriendo y levantando la caja que contenía la pizza. Elevó una ceja haciendo que ladeara mi cabeza y revolara los ojos.—Y algo para tomar también—agregué elevando esta vez la bolsa con las bebidas que compré recibiendo esta vez el asomo de una sonrisa.
—¿Algo más?—preguntó con una pizca de esperanza en su mirada a lo que solté una risita. Me dirigí hacia la mesita que estaba ahí y coloqué todo encima.
—Si, también traje pie, Dean.
—Oh, sabes que eres la mejor.—dijo dirigiéndose a la mesa.
***
—¡No puede ser!—Solté una carcajada.
—¡Hey! Estaba borracho, ¿okay?—Se defendió.
Una vez que habíamos acabado con la comida, decidimos jugar un poco a ''Yo nunca'' para matar el tiempo.
—Está bien, está bien, tu turno.
Posó su mano bajo su barbilla haciendo como que pensaba y yo volví a reír, tome uno de los cojines que había en el suelo y se lo aventé a la cara, pero el lo atrapó y rió también. De repente paramos de reír y nos quedamos viendo por lo que pareció una eternidad.
—Yo nunca... —habló por fin, recordándome el juego.—Nunca he deseado a mi mejor amiga tanto como lo hago ahora.—pronunció sin dejar de verme, tomó la botella y bebió de ella. Pasé saliva y el hizo lo mismo. Pude ver su manzana de Adán subir y bajar.
Madre mía.
—Vaya, a alguien empezó a afectarle el alcohol ¿eh? Creí que tenías más aguante, Winchester.—me paré del suelo recogiendo rápidamente todo lo desechable.
Me dirigí a la mesa a dejar las latas de cerveza y la botella ahí y entonces sentí el contacto de su mano en mi cintura y su respiración en mi cuello, me tensé y cuando pensé que no podría ser peor, pronunció con voz ronca:
—Sabes que no estoy borracho. No esta vez.—Algunos recuerdos de año nuevo volvieron a mi cabeza.
El peligrosamente cerca de mí. Sus labios rozando con los míos. Nuestras respiraciones agitadas. Ropa desapareciendo. Cerré los ojos sin creerlo, todo este tiempo creyendo que no recordaba. Me giró delicadamente pero tambalee y como auto reflejo me aferré a él con fuerza.
—Jamas podría olvidar algo como eso.—Adivinó mis pensamientos.—Lamento que pensaras eso.
Respiré hondo y por fin hablé.
—Dean...—Evitaba su mirada a toda costa.—Querías tener sexo con alguien y yo estaba ahí y eso es lo mismo que quieres ahora. Fui una más en tu gran lista...—Dean me cortó antes de que pudiera seguir hablando.
—¿Eso es lo que crees?
—¡No! Pero tu sí.—Suspiré.—Debiste irte como todos los años.
Posó sus manos en mis mejillas y elevo mi cara para que pudiera verle, escasos centímetros nos separaban.
—Es que hay un problema.—Fruncí el ceño y el seguidamente continuó.—Ninguna chica que pueda encontrarme por ahí tiene lo que estoy buscando. ¿Sabes por qué? Porque no son tú y eres realmente un dolor en el trasero, porque desde hace tiempo que solo te busco a ti, entre todas ellas. ¿Eso te parece normal, Lena?
—No, estás loco.—
Acabé con la distancia sin poder resistirme. Lo besé con fuerza y el me lo devolvió de la misma forma.Mis dedos se enterraron en su cabello. Sus manos viajaron desde mis mejillas hasta mi cintura y de ahí siguieron descendiendo hasta llegar a mis muslos, dio un pequeño empujón para cargarme y sentarme en la pequeña mesita, nos separamos minímamente para coger algo de aire y Dean aprovecho para quitarse la camisa y yo mi blusa. Volvió a cargarme y me llevó hacia la cama, donde me depositó con cuidado. Se puso sobre mi sin aplastarme y comenzó un camino de besos pasando por mi cuello, mi pecho, mi estomago.
Y es que en ese preciso momento todas mis dudas habían decidido desaparecer y dejarme sola con él, sabía que seguían ahí pero se habían tomado un descanso; no me importaba lo que pasara mañana, solo ese momento importaba, porque eso era lo que hacía Dean Winchester, te hacía cuestionarte todos y cada uno de tus ideales, te hacía dudar de ti misma, pero a la vez te hacía sentirte tan querida, tan amada, tan... Deseada. Y creo que esas eran algunas de las razones por las que me atraía tanto.
