manuel pdv
Llevaba mas de 20 minutos viéndola, me gustaba ver como arrugaba su nariz cuando buscaba calor y se movía.
Iba dejar el vaso de agua en la cocina, cuando regrese ella estaba despierta y poniéndose su chamarra.
"¿Te vas?" pregunte, y yo voltee a verla, se veía tan preciosa, así recién levantada, toda despeinada, me pareció tan tierno que sonreí.
"Si debo irme." dijo y se acerco a mi.
"Quédate, por favor..." dije, ella solo agarro mi brazo y se acerco mas a mi y me abrazo, susurro un Gracias yo la abrase fuerte deseado que no se fuera, deseaba tantas cosas de ella, besarla, amarla, abrazarla... hasta deseaba hacerla... Me interrupi en el pensamiento ¿Como podía pensar eso? Estábamos hablando de Gabriela para mi es.. Es... es MI TODO, hundí mi cara de nuevo en su cabello y sonreí, luego la mire a los ojos y acaricie su mejilla y me acerque a darle un beso en la frente, ella cerro los ojos como si lo disfrutara.
Cuando vi que ella hizo eso mi corazón empezó a latir a mil, y me separe de ella antes de hacer algo del que no me pueda controlar.
"Adiós." dijo abriendo la puerta.
"Adiós, te quiero." dije.
"Yo mas, mucho mas, me hablas mañana?"
"Si."
La lleve a su carro y le abrí la puerta, ella solo sonrió y yo me aleje. Empece a caminar por el pasillo... sin mirar hacia atrás porque estoy seguro que si lo hacia, nada, ni nadie, me detendría a gritarle y llamarle, abrazarla y quedarme con ella.