Hikari And The Four Dragons * PRÓXIMAMENTE*

PROLOGO: SOLO UNA LEYENDA

Imagen del castillo de Kyota

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Leyenda creación del reino de Kyota

Cuenta una leyenda sobre la creación de nuestro reino que hace miles de años existían cinco dioses dragones que  crearon nuestro mundo y todo aquello a lo que conocemos;  la naturaleza, los mares, los animales, el sol, la luna y el cielo.

Ellos observaban la vida en la tierra con entretenimiento, pero uno de los dragones, el dragon rojo, el único dragón hembra, aburrida de tan solo observar decidió transformarse en una bella humana y mezclarse entre los humanos para fundar un reino a pesar del descontento de sus compañeros dragones.

La dragona ahora transformada en una hermosa humana llamada Akira fue victima de la crueldad y la avaricia del resto de los humanos y sus compañeros dragones deseando proteger a su amada hermana dieron de beber de su sangre a cinco simples humanos otorgándoles sus poderes para que protegieran y sirvieran a su compañera dragona.

Uno de ellos obtuvo unas garras con las que podía cortar y destruir cualquier cosa , otro obtuvo unos ojos que podían ver, matar y controlarlo todo, otro obtuvo unas piernas con las que podía volar  y finalmente el ultimo de ellos obtuvo un cuerpo escamoso con el que podía destruir cualquier cosa y que no podía ser herido.

Akira llegó a ser reina y fundó un país llamado Kyota junto a sus cuatro guerreros dragones quienes le juraron amor, lealtad y protección.

Pronto el reino de Kyota se dividió en cuatro tribus que fue gobernadas por cada uno de los guerreros dragón, y así fue como se creó el poderoso reino de Kyota

Al cavo de un tiempo los cuatro guerreros dragones se enamoraron de  la reina y pronto empezaron a pelear entre ellos por el amor de la mujer quien dolida de ver como aquellos jóvenes guerreros mitad dragón, de los que se había enamorado prácticamente se mataban entre ellos decidió quitarse la vida para que así estos dejaran de pelear y evitar que se mataran entre ellos.

Los cuatro guerreros dragones lloraron y rogaron durante todo un año a los dioses dragones que les habían concedido sus poderes que le devolvieran la vida a la mujer de la que se habían enamorado, pero estos no solo ignoraron sus ruegos y lamentos sino que  condenaron a cada uno de ellos con diferentes maldiciones por ser la causa de la muerte de su compañera dragona.

Así estos cuatro guerreros dragones huyeron del castillo y se alejaron los unos de los otros condenados a vivir  en soledad y sin poder volver a ver a la mujer a la que amaban.