Lo único que suena en casa en como los huevos se fríen la sartén. Quedará mal hecho si se demora más...
-Yuina... Despierta a papá por mí - Digo a la pequeña, quien me sonríe y asiente de inmediato.
Escucho sus pasos hasta nuestra habitación y como golpea la puerta con sus diminutas manos. Es algo de esperar pues no tiene más de cinco años. La puerta cruje y oigo como grita para lanzarse sobre su padre.
-Eh - Exclama éste sorprendido.
-Papá, ya es de día, ¡despierta! Despierta.
-Yuina... Te lo ruego, no me despiertes así de nuevo.
-¡Buenos días, papá!
-Buenos...
-¡Mamá, papá se despertó! - Dice la pequeña entrando a la cocina con Kyouya de la mano.
-Muchas gracias, Yuina - Sonrío -Buenos días, Kyouya-kun, ¡date prisa y come o llegarás tarde!
Siete años después de la graduación de secundaria nos convertimos en una familia. Ahora soy la esposa de Kyouya.
-Aquí, siéntese - Digo abriendo una de las sillas y dejando el desayuno al frente.
-Oye, Yuina, ¿qué pasó con el "itadakimasu"?
Y también soy la madre de esta pequeña.
-¡Itadakimasu! Mamá, quiero comer yogur.
-Está bien, entonces mamá agregará la azúcar por ti.
-Yui puede hacerlo por sí misma.
-No, le pondrás demasiada - La reprendo.
-No es así... sólo deja que la haga como le gusta - Dice Kyouya.
-Papá también la necesita.
-¡Ni hablar! ¿De dónde aprendió eso? Eso es porque has consentido demasiado a Yuina.
-Pff, mamá cerdo - Dice sacándome la lengua cuando me volteo. Al mirarla veo como Kyouya se ríe tras su café.
-¡Kyouya-kun, no te rías!
Aunque sea un poco, creo que me he acostumbrado a ser esposa y madre.
-Bueno, ahora debo irme - Dice Kyouya cogiendo su chaqueta.
-Espera, espera, bota la basura en el camino...
-Está bien, pásamela - Dice volteándose.
-Gracias.
-Nos vemos.
-¡Espera!
-¿Eh?
-¿No olvidas algo?
-¿Mnn? No lo hice, lo he comprobado todo correctamente.
Estiro mis labios y cierro los ojos frente a él. Y él se acerca a besarme.
-¡Vuelve pronto! - Digo sonrojada. Es increíble que aún pueda causar ese efecto en mí.
-Sí, sí.
-¡Buenos días! - Oigo decir a la vecina cuando Kyouya abre la puerta.
-Ah, buenos días a usted también.
-Siempre eres tan amable. Mi esposo ni siquiera ha botado la basura, ni una vez. Es maravilloso, envidio a Erika-chan por tener un esposo como este.
-Hahaha, gracias... - Sin saberlo sé que está haciendo la sonrisa del príncipe. La que tanta veces hizo para agradar a las personas de nuestro instituto. El Príncipe negro aún está aquí.
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Chica lobo y Príncipe negro [Ookami Shoujo To Kuro Ouji]
RandomLa historia se centra en Erika Sinohara, una vanidosa chica de 16 años que les cuenta a sus amigos sobre sus hazañas románticas, pero en verdad no tiene novio. Ella declara que un chico guapo que aparece en una foto es su novio, pero resulta que ese...