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N.a: De ahora en adelante, lo que este en cursiva y entre "comillas" será lo que Mai escriba en su propia historia.

Si a lo largo de la historia llega a cambiar este formato, se los hare saber antes de comenzar a leer.

Disfruten el capítulo.

Narrador

Sábado por la mañana, que hambre tenían la de pelo corto a tan tempranas horas.

En la otra habitación, ya su gemela estaba lista para comenzar el día totalmente productivo frente al computador.

-Oye, haré algo de café- Comentó la mayor, bostezando- ¿Quieres un poco?-

-Lo que se ve, no se pregunta querida hermana- Mai entró en su cuenta, esperando ansioso esa bebida caliente-

Las chicas se habían quedado dormidas  en el suelo, la menor se había levantado de primera.

Iba a despertar a su hermana como todas las mañanas pero al verla la dejo dormida tan plácidamente allí en el suelo, bajo un charco de ¿Sudor?.

-Ok ¿Por dónde inicio?- Se dijo a si misma, entro a su cuenta renovada y clickeo en los borradores- Supongo que por el inicio-

"Viernes"

La albina tenia pensado poner de titulo el día que ocurrieron los hechos, como había dicho hace un día a su hermana esto solo sería una historia de un solo capítulo.

-Comencemos con esto- Cerró los ojos, se colocó sus anteojos hipster, respiró hondo, abrió los ojos y empezó la magia.

Mai había pensando desde que llegó de la escuela como sería el formato, la redacción y la narración; lo tenía todo visualizado.

Solo dejaría las palabras fluir.

"La escuela, allí todo puede salir mal.

Estaba sentada en el suelo, ¿Esperaban que dijera asiento? Pues no, esas cosas a las horas me ocasionan mucha incomodidad.

La profesora nuevamente llamó mi atención, aun no entiendo cual es el problema, el sentarme en un pupitre no haría que hubiera paz en medio oriente.

Al parecer no compartió mi pensamiento, ya que me mando a directamente dirección.

Que exagerada.

De camino a una emocionante charla con la directora sobre ética y moral, un golpe de puerta llamó la atención de todos.

Como siempre, todos balbuceaban sobre de donde provenía el ruido; y mi alma de detective me impulso a buscarlo.

Venía de la sala de castigos, me asomé por la ventanilla. Y allí estaba, joder.

-¿Quién estaba allí?- Mai pegó un grito espantoso, que llegó hasta los oídos de su vecino- ¡MIERDA, ME DEJASTE SORDA!-

-¿Qué haces ESPIANDO?- La menor comenzó a pegarle con su dragón turquesa de peluche- Mi privacidad, idiota-

-¡Lo siento! -Mai detuvo su ataque y miró a su hermana- Si sigues escribiendo así, serás conocida en poco tiempo-

Some [FNAFHS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora