¡Ni se te ocurra volver aquí de nuevo! - grito una pequeña joven después de tirar al suelo de un solo golpe a un viejo verde - ¡seguridad saquen a este maldito de aquí! - decía mientras lo seguía pateando
No paso ni un minuto en que había gritado esas palabras, para que viniera alguien de seguridad. Pidge podía ser pequeña y menuda, pero sabia defenderse muy bien esa era una de las cosas que su padre le había enseñado cuando era pequeña.
Buena esa Pidge - dijo el guardia de seguridad - si que te lo cargaste de un solo golpe - dijo mientras cogía al susodicho por los hombros -
Se lo tiene merecido,como se atreve a tocarme la vagina - si que estaba ofuscada -
Jajajajajaj - una gran carcajada salio de la boca del seguridad - A todo eso - dijo - el gerente dice que tu acto comienza dentro de 20 minutos - dijo llevándose al mañoso- así que debes de prepararte
Mierda lo olvide, ese maldito traje es difícil de vestir - salio corriendo directo a los vestidores, no sin antes dar las gracias al grandullón - gracias Petter
Si bien hacia memoria, había escuchado que esa noche llegarían al Antro un grupo de pilotos recién llegado de una misión espacial. A Pidge no le gustaba esos temas, le hacían recordar la perdida de su padre y hermano.
Para el colmo de los colmos ella debía de hacer una presentación especial con un traje tipo hindú o de odalisca, en verdad no sabia que cosa era.El ambiente estaba calmado y algo oscuro en el local, los clientes estaban en sus respectivos lugares esperando por el espectáculo cuando de repente una suave y exótica musica empezó a sonar y una tenue luz apareció en el escenario, iluminando una delgada figura vestida con un traje muy llamativo de color verde adornado con hilos dorados, llevaba un velo para ocultar su rostro, pero dejaba a la vista unos ojos color miel que eran casi hipnóticos.
Así como empezó con delicados e hipnóticos movimientos termino con una pose trágica que expresaba dolor, pero a la vez mucha sensualidad. Dio la espalda al publico y extendió sus delicados brazos hacia arriba y se inclino doblando las rodillas, hasta que la puntas de sus dedos tocaron el suelo.
El silencio solo duro unos pocos segundos, ya que fue acallado por los silbidos y aplausos de los espectadores, cuando al fin abrió los ojos vio enfrente suyo a un hombre que se le hacia demasiado familiar.¿Katie? - dijo el susodicho en un susurro casi inaudible -
¿Shiro? - le respondió Pidge, estaba sonrojada -
Con un rápido movimiento se levanto del suelo y bajo el escenario, para poder hablar con el.
¡Katie! - alguien grito su nombre entre el público - no puedo creer que eres tu - dijo asombrado
Shiro - trataba de cubrirse con el velo de la cabeza las partes descubiertas del traje - no puedo creer que TÚ estés aquí - y sonriendo pícaramente agrego - no sabia que fueses un pervertido - finalizó con una pequeña risita -
Me obligaron - respondió nervioso - ¿puedo? - extendió sus brazos a modo de saludo -
Claro que si, tonto - extendió sus brazos para darle un fuerte abrazo el cual fue respondido con fuerza por parte de Shiro
Me alegra que volvieras - soltándose de aquel abrazo - ¿quieres tomar algo?
¿Bebes? - pregunto sorprendido - no crees que eres muy joven para eso
Shhhhh - puso su dedo índice en sus labios - vamos a la barra
Pidge cogió el brazo de Shiro y lo guió directamente hacía la barra, tratando de no chocar con las demás personas.
Una vez llegados Pidge dijo - ¡hey Jenny! - a modo de llamado
La joven morena se dio vuelta y respondió con una sonrisa - hey Pidge, ¿sedienta? - y agrego - después de ese baile tan sensual, de seguro que lo estas te quedo divino - dijo picara-
Si algo - Pidge estaba algo colorada por el comentario, especialmente porque Shiro estaba a su lado - quiero lo de siempre
Esta bien - mirando a Shiro dijo -¿y para este muchahon?
lo mismo que ella - su tono de voz era serio , no podía creer que alguien le venda alcohol a los menores
Tanto Pidge como Jenny se le quedaron mirado un rato, luego ellas se vieron las caras y rieron por lo bajito
¿Estas seguro? - le dijo Jenny mientras preparabas las bebidas - ella toma lo más fuerte de la barra
Muy seguro - su semblante seguía serio -
Muy bien - dijo sonriente la morena - aquí esta su bebida - poniéndole una vaso alto delante de él - un shirley temple
Shiro llevo el vaso a sus labios ,para darse con la sorpresa de que esa no era una bebida alcohólica, miro a Pidge y esta le dijo
Espera - tomando una de las cerezas que adornaba su vaso y colocándola encima de la bebida de su amigo -
Listo - dijo con sorna - ¿no habrás creído que era verdad lo del alcohol?Supongo que caí en la trampa - dijo vergonzoso - lo siento
Descuida - dijo divertida - aun que no lo creas me tratan bien aquí
¿Enserio? - dijo curioso -
Yeep todos son amables - dando un sorbo a su bebida - si alguien se mete conmigo, Petter el de seguridad los saca de una patada - sosteniendo el vaso - Jenny también se preocupa por mi alimentación - sosteniendo mas fuerte el vaso - mis compañeras, todos son como una gran familia - dijo dando una sonrisa, algo triste
Katie - dijo en forma tierna, colocando su mano sobre la cabeza de ella a modo de caricia
Pidge cogió con fuerza la mano de Shiro y la llevo hacia su mejilla, cerró sus ojos al sentir aquel cálido contacto - Shiro - dijo en susurros, abrió los ojos y lo miro fijamente - te extrañe - tomo la mano del joven y le dio un beso en el dorso.
Ante aquella acción Shiro se puso realmente colorado, a comparación de Pidge ya que ella solo tenia un ligero color carmesí en su rostro.
Shiro conservo aquella expresión, hasta que le dijo.¿Quieres que te lleve a tu casa? - respondió nervioso - claro si tu quieres -
Esta bien - respondió - ya termine lo que debía de hacer
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Ufff si que me demorado al escribir este fic ,bueno se que a muchos no les gusta el ship pero bueno.. A mi me encanta...
Aclaro algo en este mundo pidge esta emancipada...

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Dancer
RomancePidge es una chica emancipada de 16 años, que trata de valerse por si sola después de la muerte de su padre y hermano y posteriormente abandonó de su madre... Pero que pasaría si un viejo conocido apareciera de nuevo en su vida... Esta historia tien...