Epílogo

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    Todo comenzó con la noticia de mi madre, había conocido a alguien, alguien que había logrado hacerla sonreír de nuevo, hacerla tener ese brillo que tenia tiempo sin ver y que me alegraba, si... Me alegraba pero yo sabia lo que venia tras de esto y ella sin pensarlo, lo dijo.

- Yo se que te debías imaginar lo que estoy apunto de decir, pero Chloe, es un nuevo futuro para ti y para mi, lleno de oportunidades y junto a alguien que me ha enseñado a ver la vida de otra forma - me lo dijo con aquella sonrisa sincera y llena de sentimiento que no pude evitar sonreír- yo solo quiero que seas feliz mi princesa, por eso lo hago... Para darte todo lo que no pude darte.

    Mi madre me estaba dando apoyo, apoyo moral y lo aceptaba porque sabia a que se refería pero... En ningún momento me dijo exactamente lo que yo no quería escuchar.

- Venga mama, ha sido muy lindo lo que me has dicho pero no terminaste de decirme de una vez por todas que es lo que tienes que decirme -dije arrepintiéndome de haberle pedido eso, pero mirándola con cautela-

- Nos mudamos Chloe, nos vamos a California. Allá vas a poder tener todo lo que quieras, podrás estudiar en uno de los mejores institutos, tendrás nuevos amigos y se que esto te afecta mas que todo por dejar a Michael pero Chloe, allá conocerás muchos chicos y con mayor rango social que podrán hacerte feliz sin dudarlo.

    No podía creer que mi mama me estuviera diciendo eso, estaba consciente del viaje pero con respecto a los chicos... No le había dicho que había terminado con Michael hace un mes porque pensé que iba a matarme, joder. La mire con una sonrisa que quise que aparentara ser triste pero no lo fue.

- Esta bien mamá, no hay problema. Si tu eres feliz yo también lo seré. Cuando nos vamos? -le pregunté fingiendo cierta tristeza-.

- Dentro de dos días Chloe, es momento de que vayas haciendo tus maletas. Preparate para una nueva vida, dejando todo lo malo detrás para comenzar la mejor parte de tu adolescencia donde debes. Te amo cariño. -fueron sus palabras antes de salir de la habitación-.

    Y allí estaba yo, pensando que podría ser cierto, que sería uno de los mejores cambios que pudo dar mi vida y aunque tenía cierta tristeza por dejar todo atrás, con cierta esperanza fui a hacer las maletas, sin saber... Que lo que iba a experimentar allá no solo era felicidad, también todo lo contrario, dolor y sufrimiento y sobre todo confusión, causando en el despertar de algo que no conocía y todo por un chico, todo por él... Jake Adams.

Intensa Oscuridad: El ComienzoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora