Capitulo 3

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¿Cuanto puede cambiar una persona en 4 años? Quizás el tiempo no paso en vano y no solo mi físico ha cambiado sino mi forma de ver el mundo, la forma de apreciar cada aspecto, cada situacion, deje de ser una niña vacia que solo aprecia la apariencia y me convertí en amante de los momentos, las palabras y los versos porque al final de todo eso es lo único que nos vamos a llevar ¿no?, pero lo que esta dentro del cascarón, la esencia, el ser, eso no se va tan fácil, ¿a quien pretendo engañar? Si todo lo que nació hacia el fue por ser el, porque a pesar de que su mirada era severa sus ojos siempre me dejaron ver mas allá entregandome tranquilidad, su boca nunca arrojo un insulto a mi parte, y aunque me cueste admitirlo el siempre conmigo se comporto diferente, todo el tiempo el era alegre, jovial y amaba hacer de todo un chiste, pero en mi presencia no era así, era tímido, callado y en ocasiones un poco reservado, ¿acaso Cristopher sentía algo por mi? Ahora después de 4 años temo aquel momento en que deba verlo de nuevo, en que nuestras miradas de nuevo se topen y los sentimientos que tengo bien guardados se inmiscuyan en mi realidad y hagan de mi vida un desastre, de nuevo el temor y el miedo a ser descubierta amando algo que no esta a mi alcance, algo que por mas que me cueste admitir no debe ser.

No quiero regresar a casa así que tomo el camino largo, ese que me lleva a pasear por aquel parque donde jugueteaba persiguiendo las palomas y me divertía encima de los juegos que hoy están oxidados y carentes de color; aquel parque que presenció de mi cada lagrima por una desilusión, recorrerlo de nuevo se me hace extraño y recordar que la ultima vez que estuve aquí también fue la ultima vez que lo vi.

Flashback

El día era gris tal como mi animo, había escuchado a Jas hablando con mamá sobre lo mucho que hecharia de menos a Cris cuando se fuera a estudiar, nunca imagine que se sentiría de este modo, un nudo en la garganta y lagrimas amenazando con salir, mi pecho con una presión agonizante, un corazón desquebrajado y las pocas ilusiones que me quedaban yéndose a la basura. El va y ven de mi columpio hacia rechinar las viejas tuercas, ese triste sonido era lo único que me acompañaba, o eso pensé.

—No me llamaste Sam— era el.

—¿En realidad te importaba esa llamada?

—En realidad me importas tu, Sam no quiero lastimarte...

—Un poco tarde Cris, ¿por que no me dijiste que te vas? —y allí estaba, todo lo que intente contener, ese nudo en la garganta, y las lagrimas derramándose sobre mis mejillas.

 —Sam yo, lo intente ¿si?, te dije que me llamaras y no lo hiciste, me evitaste durante mas de una semana y Jas... bueno, el ha estado algo insistente sobre ti, no quiero que el se enfade contigo.

  —¿y tu novia?¿que piensa ella al respecto? Digo, debe estar mal porque te vas.

  —Ella no era mi novia Sam, Jas lo hizo para fastidiarte, para probarnos. Sami por favor no quiero hacerte daño.

  —Deseo lo mejor para ti Cris— quiero que te quedes conmigo.

  —Déjame estar al tanto de ti.

  —Es tarde, yo... debo irme—me pongo en pie pero el me detiene.

  —Esta vez no Sam.

Su brazo baja rápidamente a mi cintura atrayéndome a el, nuestras respiraciones se acompasan, sus ojos se cierran y mi boca pide a gritos saborear la suya, pero de nuevo, no ocurre nada, de nuevo el maldito miedo se apodera de mi, de  nuevo el temor a ser descubiertos me gana haciendo que me gire y sus labios choquen con mi mejilla.

  —Adios Cris.

  —Te quiero Sam.

Como duele aun, como me arrepiento.  Al dia siguiente Cristopher estaba camino a Londres, iniciando sus estudios mientras yo seguía en casa llorando en silencio cada noche, recibí varios mails suyos que me atreví a contestar de manera cortante y empleando la menor cantidad de palabras posibles, una que otra foto que el subía a su Facebook y que yo descaradamente guardaba en mi computadora.

Camine hasta una banca y me senté mientras jugueteaba con mis dedos, ¿estaría ya en casa? ¿me recordaria? ¿sus ojos serian tan brillantes como la ultima vez que los vi?. La banca cruje y siento el peso de alguien a mi lado, no me molesto en mirar hasta que aquella persona habla.

— Nunca pense que la pubertad te sentara tan bien.

— No puedes saberlo, no me viste en mi niñez— el imprudente desconocido suelta una carcajada que me hace voltear a verlo pero lleva una chaqueta, lentes oscuros e incluso una gorra.

— No me diste la oportunidad de apreciar tu cambio, solo veia una que otra foto que posteabas tu o tu madre en redes.

Habia algo en el que me resulto familiar, trate de mirar sus ojos, pero el se levanto de golpe y mi falta de reflejos hicieron más dificil el que lo reconociera.

— Que rapido creciste Sami.

Su voz hace que tiemble y mi piel se ponga de gallina, un escalofrio recorre mi nuca y mi corazon amenaza con estallar en mi pecho, no puede ser el. Corro hasta el y me posisiono en su camino, me tomo el atrevimiento de tomar su gorra y arrancarla de su cabeza dejando al descubierto una cabellera castaña, mi labio inferior tiembla y mi corazon palpita aun mas fuerte que antes, el sonrie y descaradamente toma mi mano y la guia hasta sus lentes.

— Aun te sigue controlando el miedo— dice.

Aquellas palabras son el detonante.

— Ya no más.

Y de un zarpaso arrebato sus gafas para que sean ciertas mis sospechas, mi cuerpo no mentia, era el.

                                ♡♡♡






Chan chan chan, bueno, no soy muy buena en este pero gracias a las pocas y pocos que me leen espero gusten de mi historia. Recibo comentarios, criticas, estrellas y por supuesto buenas vibras.  Nos leemos dentro de poco 😘😘
     

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⏰ Última actualización: Jun 26, 2017 ⏰

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