Parte unica.

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¿Cuanto dolor hacía falta para que ni lo más cercano al amor pudiera hacerle quedar más en este infierno al que llamaban vida?


El castaño caminaba lentamente hacia la ventana cual cristal se encontraba ligeramente roto mientras lo tocaba con su dedo indice siguiendo los finos trazos rotos de la filosa grieta marcada.


Miró a los lados, las paredes pintadas de un color entre rojizo y cafe oscuro que de lo agrietado parecieran derrumbarse en cualquier sigiloso momento...

Los ecos de los jadeos y gemidos viniendo desde afuera de su habitación no se hicieron esperar en ese tormentoso silencio haciéndolo sobresaltar cual molestia sentía en este momento...

"¿No tendrías que estar ya acostumbrado, Rosa Tempestad?" Se hacía la misma pregunta una y mil veces cada día desde hace dos años atrás...

No le tomó importancia, "no me queda de otra" siempre se decía a sí mismo. Llevaba trabajando en ese lugar por dos años.


Pero su corazón abría muerto justamente un año antes de que eso pasara.


Sopló un poco de su aliento caliente creando vapor a ese fragil cristal, tan fragil como los recuerdos que quiso él ocultar...

En ella escribió la primera letra de un nombre cual inicial era "Y"...

Quizás una vaga como fugaz idea aún tenía la esperanza de que se arrepintiera de acabar con todo...

Escuchó en el pasillo el sonido del eco de los zapatos de aquél hombre que vigilaba el lugar, él se acercaba a aquella carcel la cual llamaba "habitación", que había sido testigo del infierno al cual era sometido, y de su llanto en soledad.


–Rosa Tempestad, tu turno ha acabado hoy, mañana comenzaras más temprano...¡No lo olvides!– Escuchó su fuerte pisar para por fin alejarse como días anteriores una vez más.

Rosa Tempestad sólo se limito a dar cortos pasos hacia su cama para despues sentarse en ella mientras se ahogó dentro de lacivos pensamientos, los ocultó de todos pero de él mismo no los podía ocultar.


Tomó de nuevo aquella sucia y empolvada botella de alcohol y la vació en su copa favorita mientras miró la resplandeciente luz de luna entrar por el agrietado vidrial.

Encendió un cigarrillo mientras pudo sentir sus lagrimas salir junto con una sensación en el estomago de amargo pesar. Sólo se limito a cruzar las piernas una encima de la otra mientras soltaba el humo de su boca proveniente del cigarrillo.

–¿Acaso alguna vez tuve dicha alguna?...–negó con la cabeza y rió con pesar.

Lo conocen como La Rosa Tempestad, él quiso que le dieran ese nombre, ya que tenía un valioso significado para él...su nombre verdadero era Taehyung, pero esa parte de él ya estaba muerto desde los ultimos tres años...y era porque había cometido el que fuera el más grave error de su vida o el acto de amor más doloroso que solo pocos humanos envueltos en tragedia conocían. Esto uútimo era lo que pensaba él. Pero él estaba equivocado.

Se agachó un poco y sacó del cajón de su mesita de noche una rota fotografía...frunció sus labios y volvió a fumar un poco más de su cigarro...

Rosa Tempestad[taegi/yoontae] ONE SHOTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora