Es la primera vez que me animo a escribir de tí, en realidad tuve tantas ganas de hacerlo cuando ni por equivocación tu fallecimiento me lo imaginaba.
Hoy te escribo dándome cuenta de que ya es muy tarde para que tu puedas leerlo y con otra intención.
¿Sabes? Yo consideraba esto de los velorios para gente adulta, gente que ya había vivido; a mis 16 años es el dolor más grande que tengo, es algo inaceptable, algo que es imposible.
Te extraño mi niña, estraño tanto tu risa, tu sonrisa, tus travesuras, tus pequeñas manitas, tus abrazos, tus consejos, la seriedad con la que podíamos hablar.Fuiste mi primera mejor amiga y lo sigues siendo mi niña.
A casi un mes de que partida quiero que sepas cuanto te extraño, que hace falta tu escencia aquí.Me dijeron: "Tu y ella son una misma, ella está en ti. Se fue amandote por que tu sabes que ella te amaba"
Te amo, te amo tanto.