Niña Mal - Christopher Vélez Y Tu

Capítulo 8

Christopher se levantó inmediatamente muy nervioso.

Christopher: -¡Señor, No es lo que piensa! ¡Ella se me lanzó encima y...

TP: -Christopher, nos explicaste el incidente en la limusina y te creímos...pero ¡esto!

Christopher: -¡Se lo juro! ¡Yo tomo enserio mi trabajo!

TP: -¡_____(TN)! ¿Es cierto lo que dice Christopher?

TN: -Papi yo me quité la ropa para bañarme y justo cuando iba a entrar al baño, él se me lanzó encima y yo grité.

Christopher: -¡Eso no es verdad! ¡Tú te me lanzaste a mí!- se defendió.

TP: -Vélez, no quiero que esto esté pasando en el internado todos los días.

Christopher: -No será así, usted sabe como es su hija y como soy yo. Conoce la fama de cada uno, por favor.

Mi padre me miró dudoso y miró a Christopher.

TP: -____(TN) ¿Te gusta Christopher?

TN: -¿Qué?

TP: -Ven- salió de la habitación, yo lo seguí.

TN: -¿Qué pasa?

TP: -No me engañes, princesa.

TN: -¡¡Papá!! ¡No me gusta! ¡Lo odio!

TP: -¿Y por qué tan pasión con ése ''odio''?

TN: -¿Cuál pasión?

TP: -Hagamos un trato.

TN: -Amo tus tratos, siempre gano algo caro- sonreí.

TP: -Ve al internado voluntariamente...

TN: -Ok, nada vale eso...-me volteé.

TP: -¿Ni vivir sola con Kalani en cualquier país que quieres?

TN: -¡¡¿Es enserio?!!- me emocioné.

TP: -Si- me tomó de las manos- Tú vas a ése internado y te estás ahí durante seis meses y cuando salgas te financio cada centavo que necesites para vivir sola.

TN: -¿Qué tal si no acepto?

TP: -¿Te quieres quedar aqui sola mientras Kalani está en el internado?

TN: -Ok, está bien...iré.

TP: -Admite que vas porque no quieres dejar de ver a Christopher- me hincó las costillas.

TN: -¡¡Papá!!- me volteé y entré de nuevo a la habitación, y sí, seguía semidesnuda. Christopher estaba sentado en la cama, me miró cuando entré, hice un gesto con mi mano fingiendo un látigo y sonreí, Christopher rodó sus ojos. Me di un baño y me envolví en la toalla, al salir me vestí.

Christopher: -Wowow, Tranquila que no vamos a un casino de tu ciudad adorada.

TN: -Cierra esa linda boquita o te clavaré un tacón en el ojo.

Christopher: -¡Que tierna!

Tomó mis maletas y salimos en la limusina, hasta que llegamos al aeropuerto privado de la familia, subimos, entramos y me acomodé dentro. Noté que sólo viajábamos Christopher y yo, esto iba a estar bueno.

TN: -¿Seguridad?

Christopher: -No creo que te lances del avión, pero por si acaso nos deshicimos de los paracaídas.

TN: -No importa si Londres me da la bienvenida con una balacera sino que me suicide en un avión.

Christopher: -Eres más peligrosa que un ataque terrorista.