Viernes, 17 de febrero de 2017
He intentado odiarte, pero no puedo.
He intentado sentir desprecio por ti, pero muero en el intento.
He intentado olvidarte con una botella en mano, pero es inútil.
He intentado ya no amarte, pero es injusto.
Mi cabeza me grita que deje de ser una idiota, que te olvide, que te deje atrás, pero, ¿cómo le hago?
Lo he intentado, te lo juro. Y me has enseñado que no se debe jurar en vano, ¿no es así?
He intenado besar otros labios pero siempre vuelvo a los tuyos, he intentado encontrarte en otros brazos pero los tuyos son mi refugio, no sabes que coraje me da que yo doy consejos para que sigan adelante y yo no puedo hacerlo. Y creéme cuando te digo que si en un futuro tú vuelves, te recibiré con los brazos abiertos, a pesar de todo amor mío. A pesar de que nuestro amor este jodido.
Ha pasado un año desde que te conocí, recuerdo el primer beso que te dí, recuerdo lo nerviosa y feliz que estuvé cuando volví a verté y lo enamorada que terminé después. Sigo escuchando tus canciones favoritas, las canto a todo pulmón y te escuchó cantando a mi lado, cantándome a mí; solo a mí.
Me gustaría hablarte, ¿sabes?
Escuchar un ''te amo'' por última vez de tus labios, un último beso, un último abrazo. Una última oportunidad cariño, solo una más.
Pero es algo inútil, ¿no es así?
Tú me odias; y yo te amo.
Tú deseas estar con alguien más; yo sólo quiero estar contigo.
Tú ya me olvidaste; yo no te puedo superar.
Que injusto es todo esto, que injusto que hayas sido tú a quien eligío mi corazón y no a alguien que no me hiciera tanto daño.
Que mal para mí.
Que mal para ti.
Porque cariño, tú perdiste a alguien que estuvo ahí aún cuando tú fuiste el más idiota del universo, perdiste a quien estuvo cuando nadie más lo estaba, a pesar de que no me hablabas, ahí estaba. Tú perdiste a alguien que te amó de verdad. Perdiste a quien decidio perder su dignidad antes de perderte a ti, a quien estuvo a altas horas de la noche junto a tu madre, preocupada porque no llegabas.
Sé que es lo que te gusta y también lo que odias, sé que es lo que más amas y tu mayor deseo, sé cuanto te duele lo que te pasa y sé que eres un desastre; y te amé aún sabiendo que lo eras; un desatre que no tenía remedio, sé que te amaré hasta que duela, y eso significa que te amaré siempre. Sé que me amasté también, pero sé que eres un poco idiota en eso de querer, así que sí, perdiste a alguien que te quiso por lo que eras, no por lo que podrías darle o lo que podrías tener.
Me perdisté.
Te perdí.
Nos perdimos.
Así que no, no te odio, tal vez nunca lo haré, ya me he dado cuenta de eso pero esta bien, todo esta bien.
Puedo decir que no quiero verte nunca más.
Puedo decir que te odio hasta rabiar.
Puedo decir que ya no te quiero.
Puedo decir que ya no te necesito.
Y eso es verdad, porque no te necesito ni para respirar, también quiero que sepas que es mentira.
Porque te amo con locura.
Te extraño día a día.
Porque si tú vuelves algún día seguiré siendo tuya.
Porque lo único que espero es que puedas recapacitar. Y sepas que como yo nadie más te va a amar, nadie más te va a soportar, por el momento sigue tu vida cariño, equivocaté mil veces más.
Yo estaré esperando que vuelvas.
Y cuando lo hagas, regreses siendo alguien mejor, alguien más maduro que pueda hablar bien del amor, porque ahorita no sabes lo que quieres; y si lo sabes:
Entonces lo que quieres no soy yo.
Amy Duque.
ESTÁS LEYENDO
Mi mente escritora.
Short StoryAquí pondré algunos textos o frases que he estado escribiendo, espero sean de su agrado.