Dangerous Woman (SuperCorp)

-13-

Kara Pov.

Mi respiración era agitada mientras Lena jalaba mi cabello hacia atrás.

Sus movimientos eran sensuales, mientras yo me encontraba en la silla.

Dios... Lena era sumamente hermosa y mucho más si solo estaba en ropa interior, estaba feliz de estar en mi apartamento y no el de ella.

-Lena-. Dije soltando un gemido cuando mordió mi oreja.

No aguante más y la tome de los muslos adentrándonos en mi habitación.

La deje en la cama y con rapidez me quite la ropa mientras Lena me sonría de donde estaba.

Subí a gatas mientras sus manos recorrían mi cuerpo, entrelaze nuestras manos mientras juntaba nuestros labios.

El beso era apasionado con mis dientes estire el labio inferior de Lena sacándole un poco de sangre para lamerlo con mi lengua.

Comencé a besar su cuello haciendo que Lena gimiera y pasara sus manos por mi espalda hasta llegar a mi trasero y apretar con fuerza.

Ambas nos miramos con lujuria en los ojos, jamas había sentido esto, jamas había querido tocar tanto a alguien.

Lena me empujó y se sentó en mi abdomen, moviendo su pelvis de adelante hacia atrás.

Mis manos fueron a sus caderas, pero luego las lleve a su espalda para poder quitar esa prenda tan estorbosa.

Me levante aún con ella encima para besarnos entrelazando nuestras lenguas.

Gire dejándola debajo de mi, comencé a besar su cuello, después sus pechos poniendo atención en cada uno.

Para después descender por su abdomen dejando mordiscos y chupando todo a mi paso hasta llegar al elástico de su ropa interior.

Con mis labios baje la prenda lentamente escuchando los jadeos de Lena, me encantaba tenerla así.

Debajo de mi pidiendo más, a vente la prenda y comencé a besar el interior de sus piernas.

-Kara... Kara por favor-. Suplicó mientras sus manos agarraban con fuerza mi cabellera.

Sonreí pero no hice caso a lo que me pedía, me burle por unos segundos pero después me acomode y acerque mis labios en donde más me necesitaba.

Sus jadeos fueron demasiados fuertes y estaba segura que mis vecinos la escucharían.

La fuerza que ejercía en mi cabellera me excitaba más así que con mi mano derecha la acaricie para después adentrar uno de mis dedos y después otro.

-¡Kara! ¡Kara más!... Oh dios-. Decía ella mientras yo trabaja en lo mio.

Hice lo que me pidió y acelere mis movimientos, minutos después Lena se retorcía en mi cama gritando mi nombre.