DARK NIGTHMIRE - ¿MUERTE O SALVACIÓN?

Capitulo I

— Les diría que me sorprende que hayan llegado tan lejos, pero no, debo admitir que son buenos, ¡INCLUSO! Diría que alguno de ustedes serian excelentes Laufers del juego.

— ¿Porque me miras a mí? —dijo Amy.

Lucifer sonrió dejando ver su perfecta y seductora dentadura, de la cual se notaban unos puntiagudos y atemorizantes colmillos, volvió a su trono y se dirigió a Selenada qué miraba a los mortales que tenía en frente.

— Por favor Selenada diles algo a nuestros valientes jugadores, no seas tan mala anfitriona.

Ella continuaba mirándolos como un felino a su presa, sin prestarle atención a lo que su colega le decía.

— ¡No te quedes ahí, como si nada! —dijo Dante— ¡ Estamos aquí para ganar de una vez por todas este maldito juego!, ¡Prepárate de una vez!

El demonio quien lo miraba con una sonrisa irónica dibujada en su rostro, soltó al tiempo que el chico gritaba.

— Deja por favor mi querido Dante el afán a todo momento, tómate tu tiempo, no todos los mortales tienen el privilegio de verme y más de retarme como lo estás haciendo; además puedo notar que algunos de tus compañeros no están en las mejores condiciones para jugar, y si voy a tomar sus vidas quiero hacerlo con honor, quiero que estén todos en su cien por ciento...

Dante miró a sus demás compañeros, dándose cuenta que lo que su enemigo decía era cierto.

— Así que les daré el tiempo necesario para que descansen y se recuperen, ¡Claro! Si me reina lo permite —la miró con adulación burlona.

Ella se levantó y mientras se marchaba susurro.

— Igual terminaran muertos...

— ¡Todo está dicho! —volvió Lucifer con su efusiva voz— entonces pueden descansar gamers.

Todos se miraron entre sí desconcertados por la bienvenida y el comportamiento del Princepps y la Arconte. Ninguno sabía que responder, todos esperaban a que alguien tomara la iniciativa y por supuesto, era una difícil decisión. Entre Dante y Amy hubo un choque de miradas donde telepáticamente podían saber que de verdad el equipo necesitaba un descanso, pero de igual forma no podían confiar en un demonio.

Dante hizo un pequeño ademán con la cabeza y respondió a Lucifer quien los miraba con la cabeza apoyada en la mano.

— ¡Lucifer! — empezó.

— ¿Sí? — respondió cansado de esperar.

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¨¿Donde andan?¨ — preguntaba Ellie tratando de que su voz sonara lo más baja y entendible posible.

¨Aún sigo aquí¨ — Nathan — ¨sobreviviendo a tanta palabrería de la decana, cree que sermoneando sobre lo importante que es meterle "Sangre, cuerpo y alma" a la carrera impedirá que muchos queden colgados este semestre¨.

¨Yo los estoy esperando en la plazoleta¨ — Ryu.

¨¿Saliste tan temprano?¨ — preguntó Nathan.

¨Nunca entre¨ — Ryu respondió — ¨Jajajaj¨

¨Esto lo sabrá mamਠ— apareció Tamina amenazante.

¨Uy Ryu, eso pasa cuando tu hermana pertenece al mismo grupo de amigos¨ — Ellie daba leña al fuego, esperando ser testigo de una divertida discusión.

¨Oye Tamina sabes que este no es el lugar para declaraciones¨ — salió en su defensa Ryu.

¨¡Oigan dejen de hablar tanto en el grupo, algunos si estudiamos!¨ —llegaba Dante furioso por tanto embrolle.

¨Si por favor¨ — Amy — ¨Parece que no se vieran en años.¨

¨Mejor veámonos todos después de clases en el restaurante del Monkey, ¿Les parece?¨ — propuso Nathan con su característica cordura.

¨No¨ — Tamina — ¨Mejor en el de comida mexicana, el del Monkey siempre esta repleto.¨

¨Bueno todos ahí, ¿Correcto?¨ — anunció Dante.

¨Sip¨ — Tamina.

¨Esta bien...¨ — Ryu.

¨Allí nos vemos, bye¨ — Amy.

¨Ok¨ — Nathan.

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¨¿Y Ellie?¨

¨Ah, si claro, ¡Perdon! Jajaja¨ — Ellie.

¨No falten chicos, y por favor dejen ese grupo en paz...¨ — terminó por decir impaciente Dante.

                                                                    —Philip L.C.—