Me pediste que nunca te olvidara, sabiendo que eso no era ninguna opción, como iba a olvidar esos momentos que me marcaron el alma, tus ojos, tu sonrisa, tus palabras que aunque no decían lo que yo quería, me derretian el corazón como el fuego a una vela.
Para mi tu recuerdo está hecho de acero inolvidable, y que entro nosotros no hubo amor, como le pedía todas las noches a la luna, pero estuviste a mi lado para soportar mis locuras, caídas, sueños destrozados....
Y aunque nunca leas estas palabras te estaré agradecida toda la vida, por estar hay y ser la columna de mi corazón.07/05/2017
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Historias de una edad
Short StoryNoa, Miren y Aria son tres mejores amigas en su último año de secundaria. No saben donde terminaran, pero tienen claro que este año se llevarán más de una experiencia de esas que te cambian la vida. . . . . No es una novela, son historias y sentimie...