Hola, Sadi

Capitulo II

" me gustan tus pestañas negras
Y tus labios rosados.
Cuando pasas por mi lado, suspira tanto mi corazón que siento perder la razón."
Me quede mirando el celular, paralizado.
Y de repente me percato de que Sadi estaba en línea.
Comencé a arrepentirme de lo que había hecho y solo quería esconderme para siempre y no tener que verla mañana a en el colegio.
- ?? *
Ese fue su respuesta, y es obvia nunca habíamos hablado en la vida, tal vez ella no sabía de mi existencia y yo, como un tonto de la nada le mando un poema que habla de sus pestañas y mi corazón ¿buena primera impresión verdad?.
Me quede mirando mi celular con los dedos puestos en el teclado, sin saber que escribir...
- Lo siento por ser tan impertinente, soy Andy. Lo más probable es que no me conozcas, así que si quieres solo ignora este mensaje.
Definitivamente me sentía como un tonto, le acabo de hablar a la chica que me gusta de una manera muy extraña, lo más seguro es que esto no vuelva a pasar.
Me quede dormido pensando en lo que acababa de pasar, sintiéndome estupido y sin ganas de ver caras al siguiente día, ella no me contesto, no sabía de mi y tampoco quería saberlo. A la mañana siguiente me retrasé e hice todo corriendo, cuando iba en el auto saque mi celular para decirle a Alex que me guardará un asiento ya que tal vez llegara tarde, y mi cara cambio, repentinamente se formó una pequeña sonrisa y esperanza. Sadi si me había respondido
- Me gustó tu poema, bueno si es que es tuyo.
En ese momento no sabía que responderle y ya iba llegando al colegio, guarde rápidamente el celular y me bajé del auto.
La busque durante todo el día, en los recreos, en la sala de matemáticas y en todas las clases, pero ella no estaba. Me sentía tan bien y con tanto valor, que lo único que quería era verla y hablarle, está vez si, esta vez le hablaría y le diría que yo soy Andy, que me gusta mucho y quisiera conocerla más, pero ella no está ahí. No fue a clases.
Le conte a Alex lo ocurrido, estaba tan feliz, hasta más que yo podría decirlo, me dijo que no me rindiera y que siquiera mandándole mensajes
-Si te respondió y te dijo que le encantó tu poema, es una buena señal, sigue haciéndolo. Tal vez en algún momento sea ella quien quiera conocerte de verdad.
- No lose, hoy estaba tan dispuesto a hablar con ella, pero no vino ¿y si eso quiere decir algo? Ella es mucho para mí._ al ver mi cara, Alex me agarró de los hombros y mirándome fijamente me dijo
- Andy, amigo, nadie es mucho para ti, ni para nadie. Nadie es mucho para nadie y tampoco es poco, la persona que de verdad te quiera algún día va hacer suficiente, no va a necesitar más ni menos, y si Sadi Roman no puede saber eso, no es para ti.
Alex era el mejor amigo, siempre tenía la palabra justa.
- Está bien.