ᴾᵉʳᶠᵉᶜᵗ ˡⁱᵃʳ

Chapter Five

Jungkook jamás había estado en un parque de atracciones tan grande y eso le ponía los nervios de punta, sin añadir el hecho de que estaba en compañía del rubio que de repente había adquirido la personalidad de un niño y se encontraba revoloteando de aquí para allá con los ojos brillantes y una gran sonrisa en su rostro.

-La operación “gusanito y Jungkook” da inicio oficialmente. -le dijo Kim- ¡Vamos a conseguir boletos para la montaña rusa!

-¿Por qué siento que estoy con un niño de cinco años?

Kim le sonrió ladino y colocó sus brazos alrededor del cuello de Jeon -Sé que te encanta mi actitud.

Jungkook lo tomó de la cintura y le susurró suavemente al oído -Hay muchas cosas que me encantan de ti, precioso.

El rubio se quedó de piedra, se supone que este es su juego y que Jeon no es más que un simple peón. Toda este coqueteo es para ganar una apuesta, pero que de repente el moreno le regrese sus insinuaciones lo dejan confundido, y es que le es imposible no quedarse pasmado ante esa sutil sonrisa que aflora en el rostro contrario.

-Me halagas Jeon, veamos si tienes el mismo entusiasmo en la montaña rusa.

Taehyung lo soltó y se dirigió a comprar los dichosos boletos para el estúpido juego mecánico, donde Jungkook estaba parado se podía apreciar la esbelta figura que poseía el susodicho, sin mencionar el gran deslumbre que le daba la luz del sol. En medio de su ensoñación, una notificación espabiló al moreno.

Choi
¿La cita va bien? Sin
importar lo que pase, tienes que
besarlo.
17:57 P. M

Dejó el mensaje sin responder y siguió a Taehyung, quien ya se encontraba dentro del asiento para disfrutar de la montaña rusa. El muy cabrón se sentó en la primera fila y estaba con una sonrisa que gritaba “golpéame” a gritos, Jeon se sentó a su lado de mala gana manteniendo la idea de que cuando todo se acabara finalmente podría besar al rubio y tener algo de ventaja en el juego.

-Si no cierras los ojos en ningún momento del juego, te daré lo que quieras.

Jungkook alzó ambas cejas -Ambos sabemos que yo siempre gano, Kim.

-Nunca apuestes con un apostador, Jeon.

El recorrido empezó y se podían escuchar los gritos desenfrenados, unas cuantas maldiciones y voces llorosas, pero lo que más podía escuchar Jungkook era la risa de Taehyung como si estuviera divirtiéndose después de años sin haberlo hecho. En ningún momento de aquel trayecto infernal Taehyung dejó de reírse, cuando llegó la caída desde la cima el moreno no pudo evitar buscar la mano del rubio y apretarla, desde la cima podía apreciar las brillantes luces de la ciudad;el sol ocultándose tras las montañas hacia que todo se viese más brillante antes de caiga la noche.

No cierres los ojos Jungkook, la ventaja que tanto deseabas tener puede ser tuya.

Todos sus sentidos fueron anulados en los segundos que duró la caída, Jungkook sólo podía pensar en lo cálida que era la mano de Taehyung y en lo mucho que quería ganar la estúpida apuesta para pedirle un beso. No habían segundas intenciones o sentimientos de por medio, él simplemente quería ganar.

Ganar una y otra vez.

Para cuando se dio cuenta, solo quedaban Taehyung y él sentados en la atracción. Se quedó distraído en lo que sujetar la mano del rubio le provocaba, la soltó de manera brusca y sonrió victorioso; en ningún momento cerró los ojos.

-Gané.

Taehyung no lo escuchó, estaba con el rostro ardiendo en llamas y sentía la ausencia de la mano contraria, sus sentidos no le hacían caso y los pensamientos iban a mil por hora dentro de su cabeza.

-Como sea. -se bajó de la atracción y caminó lo más rápido posible.

-¡Eres un mal perdedor!

Jungkook intentó seguirle el paso hasta el estacionamiento, a pesar de que estaba oscuro pudo divisar al rubio apoyado sobre el capón del auto con una cara de que se lo llevaba el muerto, se acercó de manera suave hasta quedar al frente de Taehyung.

-Me debes algo, Kim.

Kim le evitó la mirada -Pídelo luego, tenemos que regresar.

Jungkook se acercó hasta que sus rostros chocaron, apoyó ambas manos en el capón y no despegaba la mirada del rubio, quien de repente parecía más pequeño, más vulnerable.

-Me dijiste que podía pedir lo que yo quiera. -dijo con la voz rasposa -Y lo único que quiero en este momento es besarte Taehyung.

Taehyung levantó su mirada y por primera vez en mucho tiempo se sintió intimidado, sabía perfectamente que si besaba a Jeon todo el tema de la apuesta se iría a la basura.

Él quería besarlo, no tenía que ser un genio para saber que Jeon Jungkook le gustaba desde que colocó su atención en él, se podría decir que desde antes.

Taehyung sabía que si lo besaba, las reglas del juego cambiarían.

Pero Taehyung nunca ha sido alguien que juega de acuerdo a las reglas

-¿Qué estás esperando para besarme? Los labios se me resecan, precioso.

Sin nada más que añadir, Jungkook juntó sus labios en un rápido movimiento. Nunca fue su intención besarlo de manera suave, el beso era fuerte y ansioso pero al mismo tiempo Jeon sujetaba a Taehyung como si en cualquier momento este pudiera romperse; Kim se aferró a la camisa del moreno y profundizó el beso pasando suavemente su lengua sobre los labios ajenos, el menor marcaba el ritmo del beso y el rubio aceptaba gustoso la rudeza que Jeon le daba.

Se separaron un instante y volvieron a buscar el calor ajeno que les brindó el beso, Jungkook juega con el cabello del rubio y Taehyung sujeta del rostro al moreno. Ninguno quiere pensar en lo que pasará después, por ahora sólo son ellos dos quitándose las ganas que tenían por el otro.

ME EMOCIONÉ AKSKSKSKSKSKS
BTW, si sienten que la historia avanza un poco rápido les recuerdo que va a tener 15 capítulos uwu