He escrito a una carta a mi amada.
Es hora de buscar nuevos aires.
Aventuras, misterios...
Cosas por descubrir.
No pienso quedarme en este puerto esperando, a que un milagro pase. Alguien quien me acompañe.
En el viaje encontrare a marineros que se aran mi familia, quien quiera subir a mi barco,
¡Bienvenido seas tripulante!
Me voy sólo y espero llegar acompañado.
En esta triste noche le digo adiós a todo lo que pudo ser.
Le digo hola a todo lo que hay que ver.
Quien estará en este barco, me asesorara tal y como soy. Respetare como esas personas me respetaran.
Irán conmigo si de verdad quieren estar conmigo.
Enfrentaremos juntos las tormentas y llegaremos a nuevas tierras.
Siempre diré en donde estoy, es su decisión alcanzarme a dos me voy.
Mirare hacia atrás para recordar todo lo que deje y lo que fui. Mirare las estrellas; agradeceré por verme crecer.
Elevo anclas y seguiré mi camino en altamar.
Es hora de decir adiós, gracias, me voy.
¡ZARPAMOS!
