¿Por Qué? ||Gochi-Terminada||

Epilogo.

Han pasado 15 años desde que te perdí, hoy es nuestro aniversario, estoy frente a tu tumba colocandote esas flores que tanto te gustan.

Todos estos años han sido difíciles para mi, pero ahora estoy feliz.

Ya mi tiempo se estaba agotando.

Vi crecer a nuestros hijos, Pan, nuestra nieta ahora era una linda jovencita, me recuerda bastante a ti, le encantan las artes marciales y tiene tu mismo carácter.

Goten se casó con la hija menor de Vegeta.

Gohan y Videl siguen igual o más  felices, disfrutando de su matrimonio.

Y yo, vivo solo en la montaña paoz, en esa casa que era nuestra.
Cuando era niño amaba estar sólo, pero ahora odio estarlo, extrañaba tenerte conmigo.

Pero no hay que deprimirse, pronto estaré contigo.

Mi tiempo en la tierra se esta acabando, y para aprovecharlo daré unos últimos recorridos, llenándome de recuerdos de ti, mi amada Milk.

Ese árbol donde nos encontramos, donde tuvimos nuestra primera cita, esas islas a las cuales visitamos para poder apagar el fuego del castillo, ese lago donde nos casamos, nuestra casa, donde inició toda nuestra historia y donde hoy termina para los seres de la tierra, para nosotros no acabará, miles de aventuras tendremos en el otro mundo.

Me despido de mis amigos por última vez, y se que algunos los veré pronto en el paraíso.

Camino hacia nuestra habitación, la cual era testigo de todos los hermosos momentos que pasamos, todas esas noches llenas de pasión y amor, todas esas veces que a solas demostramos nuestros miedos y sueños.

Mis ojos empiezan a pesar, cerrándolos lentamente, para no volverlos a abrir, no en el mundo humano.

Pasé al paraíso directamente, buscandote por todo el lugar, llegando a ese árbol donde nos encontramos, ahi estabas, mirándome con ternura, lanzándote a mis brazos, hundiendo tu cabeza en mi pecho.

-Te extrañé- confesé después de terminar el abrazo.

-Yo también Goku, bienvenido al paraíso, una nueva vida en este mundo te espera- varias almas se acercaron y arrojaron rosas blancas, dándome el recibimiento a una nueva alma que estaba en el paraíso.

-Una nueva vida junto a ti-juntamos nuestros labios, iniciando un beso tierno y lleno de pasión.

-Te mostraré todo el lugar, se que has venido bastante tiempo pero nunca llegaste por estos rumbos-nos tomamos de la mano, iniciando el recorrido, me guiabas y dabas indicaciones de todo, era verdad, estuve 8 años muerto y nunca andaba por estos lugares, siempre estaba al lado de Kaiosama, pero eso ya no sucederá, ahora le dedicaré todo mi tiempo a mi hermosa esposa, Milk.

El paraíso era el lugar más hermoso que había visto, he de suponer que a Milk también le encanta, somos amantes de la belleza de la naturaleza.

Una alma se acerca a mi esposa, quien suelta mi mano y se acerca dicha alma.

-Sucede algo?-escuché decir a Milk, me coloco a su lado.

-Tienes que enviarle este recado a Kaiosama-dijo aquel hombre, entrenándole un papel a Milk, no entendía nada.

-Espera Shik, Goku también las tiene?-pregunta ella al hombre que estaba delante de ella.

-Si, Enma Daio concedió tu deseo, creo que no se ha dado cuenta, o almenos no las ha utilizado.

-Muchas gracias Shik-el hombre sonrió y se retiro, tomo la mano de lo y la entrelazo con la mía.

-De que no me he dado cuenta Milk?-pregunto confundido, ella me da la espalda, no me da tiempo de decir algo, quedando sorprendido a lo que habia acabado de ver.

Tenia alas blancas, alas de...

-Soy un ángel mensajero-dijo ella con una sonrisa, mis manos con curiosidad tocan esas alas, tan hermosas y tan blancas.

-Yo también las tengo?-pregunto al recordar lo que el hombre habia dicho hace unos minutos.

-Asi es cariño, solamente las utilizamos cuando llevamos los recados a las demás personas, mientras estemos aqui, nuestras almas son comunes, vamos, hay que llevarle el recado de Kaiosama-tomados de las manos, extendiste tus alas y las mías aparecieron rápidamente, volando juntos.

-Me imagino que es divertido tener tantas aventuras aquí-disfrutamos del paisaje, tocando las nubes que rozaban con nosotros.

-Ahora que estas junto a mí, es aún mas divertido- sonreí de lado, galandote de la muñeca para acorralarte en mis brazos y besarte.

  Ángeles fuimos, somos y seremos por siempre.