La alarma me despertó de mi tranquilo sueño.
-Maldición -gruñí. ¿En serio? Desee poder volver a dormirme para terminar ese sueño maravilloso que estaba teniendo pero lamentablemente eso no fue posible.
-¡Karina! -escuché a mi madre gritarme desde abajo. -¡La escuela empieza en media hora, levántate ya!-
Dios, odio la escuela. Aunque sólo con pensar que podré ver a mi crush siento ganas de ir.
Me levanté, tomé mi ropa y fui al baño al otro lado del pasillo. Si, no tengo baño propio. Aunque es como si lo tuviera ya que mi madre tiene baño en su habitación y no tengo hermanos así que sólo yo uso este. Y lo agradezco.
Termino de bañarme y vestirme. Aliso mi cabello y me aplico un poco de maquillaje. Cuando quedo satisfecha con el resultado, tomo mi bolso y bajo a la cocina donde encuentro a mamá sentada en la mesa hablando por teléfono y con un café en la mano.
-Buenos días, mamá. -la saludo. -Buenos días, cariño.-me responde apartando el teléfono de su oído para darme una sonrisa y continuar hablando de negocios con quien sea que esté al otro lado del teléfono.
Me preparo un café y me siento en la mesa mordiendo una tostada. Miro el reloj en mi muñeca y veo que faltan diez minutos para entrar así que me apuro a terminar mi desayuno y subo rápidamente a lavarme los dientes. Cuando bajo, mamá ya terminó su llamada y está en la puerta agarrando las llaves del carro.
-Corre, cariño. Se nos hace tarde.- Salgo por la puerta y la cierro detrás de mi.
Al llegar al instituto me despido de mi madre con un beso y corro para llegar antes de que suene el timbre. Al entrar, veo a Jocy por los casilleros con un chico. Cuando llego, el se despide de ella y se va.
Empiezo a subir y bajar repetidamente mis cejas hacia ella y le sonrío pícaramente. -¿Qué?-me pregunta mientras agarra unos libros y cierra su casillero.-¿Cómo que qué, tonta? ¿Cuándo pensabas contarme?-
-¿Contarte qué?- frunce el ceño. Empezamos a caminar en dirección a nuestra primer clase del día.-¿Qué hacías con él?-la vuelvo a ver con la misma sonrisa de antes.
-¿Con quién?-entramos a la clase y nos sentamos totalmente atrás para poder seguir hablando.-No te hagas. Hablo del chico con el que estabas.-me vuelve a ver y sonríe.-¡Lo sabía! ¡Te gusta Dylan!-Él fue compañero nuestro el año pasado, pero se fué del instituto.
-Por cierto, no sabía que había vuelto.-le dije. En ese momento el profesor entró y se sentó.
-Yo tampoco lo sabía, ahora cuando llegué lo vi y llegó a saludarme. Al parecer no le fue tan bien en el otro instituto como esperaba.-sacó su libro, lo abrió y de pronto me volvió a ver y exclamó- ¡Claro que no me gusta, ¿qué te pasa, Karina?!-
-¡Silencio, señorita!- el profesor nos volvió a ver frunciendo el ceño y se acomodó sus lentes de abuelo para seguir escribiendo no se que cosa en la pizarra. Al parecer alguien llegó de mal humor hoy.
-Oye, tranquila.-alcé mis manos.-No es mi culpa que cuando el se despidió te quedaras con cara de idiota.-me reí al recordar eso.
-Eso no es verdad, sólo le sonreí,¿acaso es un pecado? Yo a ti te sonrío todo el tiempo pero eso no quiere decir que me gustas.-habló rápidamente.
-No, claro que no es un pecado, pero poniéndote así de nerviosa me demuestras lo contrario.-sonreí victoriosa.
-No estoy nerviosa.- me dijo.
-No, claro que no y Jason es feo.-ironicé. Él ha sido mi crush desde que entré a este instituto. -Jocy, te conozco mejor que nadie y siempre que estás nerviosa empiezas a hablar rápido así que deja de perder el tiempo y admite lo obvio.- negué con la cabeza.
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¿Dónde Está Mi Familia?
Aventura¿Qué harías si te das cuenta de que eres adoptada? La frustración, el enojo y la sorpresa que Karina sintió al escuchar por accidente esta impactante noticia, se transformó en curiosidad. Y pronto empezó a sentir deseos de averiguar mas de su vida a...