Lucky (2Doc)

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No tienes idea de cuanto tiempo puedo estar observando tu semblante vacío sin cansarme. Esa cara que cambia y se adapta constantemente a tu maldito gusto, confundiéndose con el aura de inocencia, de sensualidad, de belleza y pureza tan tuyas, que me retuerce las entrañas de una manera asquerosa. Esa cara que sabe con que expresión engañarme, que sabe esconderme el halo de tu dolorido corazón.
Ese corazón envuelto en la belleza de lo insólito, de lo insospechado y de lo lejano que envidian Andrómeda y Saturno.

Tu voz, de fondo, me ciega y me lleva allí donde se encuentra tu mente, lejos de mí.
Me obligas entonces a mirarte detallada y detenidamente, en una tortura idotizante, una tras otra, cada una peor que la otra.
Las pupilas se me endulzan, mi mirada no pretende apartarse ni un segundo del fulgor que exhalas, pues mi podrido interior se siente calmo, lleno de oxigeno y vida.
Ahora -y antes también- se que no hay ninguna vía de escape, ninguna señalización que indique el retorno a la indiferencia estática en la que me mantenía.
Tu calidez y dulzor me inundan, se extienden irremediablemente por toda mi desgraciada existencia y todo lo que conlleva... Y ya se lo que viene después: Tu calor me recubrirá, derritiendo los casquetes que se alojaban en mis extremidades, producto de un órgano que no late hace un buen tiempo. Tu belleza me sacudirá estruendosamente. Tu soberanía hará arrastrarme, caer a tus pies. Tu luz me hará querer protegerte.

Pero no. Tú y yo no somos esa clase de opuestos compatibles. Porque sé que soy oscuridad, esa clase de ausencia luminosa que arrasa y sofoca todo a su paso. Que al final termino siendo la oscuridad de tus ojos, porque yo soy así, porque he de ser quien te haga olvidar todo dolor para ocasionarte otro peor. Porque si es necesario apagaré todo tu resplandor, mataré todo destello que produzcas.

Te haré mal.

Y si te golpeo no es para protegerte de mis garras. Y si mi acidez te hiere no es porque quiera jugar contigo un rato. Y si te beso no es porque albergue sentimientos románticos hacia ti.
Recuerda que tu alma me pertenece, y esa es la única explicación que me oirás decir acerca del porqué de nuestras lujuriosas embestidas. Entre nosotros no existe nada más que el calor de nuestros vientres antes de venirnos, nada más que esas marcas que maltratan la piel para recordar el odio que fluye de por medio.

Te marcharás después de esto, tomarás algo más que tu melódica y huirás en el submarino que siempre dejo listo para que te largues... Eso si la cyborg no te atrapa antes. Eso si no me arrepiento de este soliloquio y no te dejo escapar, reiniciando el estúpido ciclo.
Te haré pasar hambre, rogar por agua, llorar de desesperación, locura y miedo. Te haré odiarme, y tal será el odio que de un momento a otro me estarás amando de nuevo. Te romperé, te haré desearme. Te haré suplicar por más. Te haré morir para luego revivir, porque para ese entonces ya estarás a mi merced.

Porque para ese entonces ya no haré nada para evitar estar a tu merced.

Si fuiste enviado por Sun Moon Stars para hacer más miserable mi vida, estas haciendo bien tu trabajo, cariño. Gracias por desbaratarme, por desarmarme suave y escabrosamente. Fingiré miedo de tu esencia hasta sentir que la sensación es real, para sentir algo más que odio y amor, que estas sensaciones que me corrompen y destruyen como quieren.

Veo mi suerte cambiar cuando me entrego a tu cadencia, cuando tu cuerpo me hace bailar contigo en el puto paraíso, diciendo groserías para ocultar y anular ese 'te amo' que llegó un par de meses atrás a mi cabeza en una situación semejante a la actual. Esa frase que pateó todos mis pensamientos cuerdos y los reemplazó con toda esta mierda, que se dió una vuelta por mi cuerpo -y que aún hace- para decidir que iba a ser aquel sitio en mi pecho donde habitaría y se escondería eventual y eternamente.

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Me quedó como el hoyo, pero:
1.-Ya me estaba secando.
2.Necesitaba que Murdoc se explicara ;-;

Me piro vampiro, chau.

Que vivan los novios [Yaoi] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora