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Salgo corriendo de ese cine, en verdad me duele que Sasuke piense algo de mí que no soy, ya que nos conocemos desde niños, ¿Por qué me dijo eso? Solo por que use un vestido de tirantes y no de manga..

Eso no me hace una ofrecida, yo no vine aquí buscando un novio y mucho menos un beso, ya que hasta hace poco tiempo, el que creí era el amor de mi vida, en unos meses se va a casar, además a Gaara-kun no lo puedo ver como otra cosa, más que como un amigo, por que a mi amiga le gusta y yo jamás la traicionaría.

Además ¿Cómo puede creer qué soy como él? Qué tiene miles de chicas detrás suyo, sinceramente no se que le ven, además él bien que estaba con Ino muy juntos y yo no le dije nada..

Tontamente creí que era diferente, ya que por primera vez pensé en verlo como algo más que un amigo, pero me equivoque -limpio mis lágrimas- antes de llegar casa, no quiero que mis padres me pregunten el por que de mi llanto.

En estos momentos es cuándo quisiera que Itachi no se hubiera ido, llegar hasta él y me diera un abrazo.

Finalmente llegó a casa y al entrar, veo que mis padres miran televisión..

Tan rápido llegaste hija— ¿Cómo te fue?

Bien madre, solo que me dolió la cabeza y volví antes..

Supongo que te trajo ese joven hija..

Si padre, me voy a dormir..

Toma un analgésico, descansa y que te mejores cariño..

Gracias mamá «ni siquiera me quedé a ver como seguía Gaara, se que actuó mal, pero creo que quedo muy lastimado, Sasuke es un salvaje, ni tiempo le dio de meter las manos...

Me recuesto, definitivamente no quiero verlo más, si nos encontramos por casualidad, no le voy a hablar, pero al decir eso mis lágrimas caen nuevamente.

- • -

Soy un imbécil, por mis celos la lastime, pero no soporte cuando vi a ese idiota querer besarla, además ¿Por qué ella no lo evito? ¿Acaso le gusta? Y de ahí su actuar..

Joder, todo me salió mal y yo que había pensado en llevármela de ahí, llevarla por ahí a caminar o a dónde ella quisiera, solo quería estar solos sin interrupciones..

Voy de regreso a casa y al pasar por la suya suspiro, ¿Cómo estará? De seguro odiándome y eso no lo soporto.

Llegó a casa y al entrar -mi madre duerme, pobre debe estar cansada, la cubro con una manta y subo a mi recámara ¿Y ahora que voy hacer? ¿Cómo le haré para disculparme con Hinata? Y al recostarme..

¡¡Hinata!!

¡¡Hinata!!

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Mi pequeña himeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora