Mi pequeña hime

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Finalmente llegamos a Estados Unidos después de muchas horas de vuelo al fin llegamos al aeropuerto, vaya que es toda una experiencia un vuelo en avión, lo bueno del viaje es que me toco sentarme junto a Mikoto-san, me hubiera puesto más nerviosa, además de sentirme extraña si me hubiera tocado sentarme junto a Sasuke..

Este tiempo cuando estamos juntos, solo nos observamos, sin decir nada de lo que él dijo y sobre todo nunca estábamos solos, más bien con nuestros amigos, Ino parece molesta conmigo, ya lo comprobé y eso me duele por que ella es una de mis mejores amigas.

Mei-chan y mi madre me ayudaron a escoger el vestido que usaré en la boda de Itachi, Ino me dijo que estaría ocupada, aunque creó es mentira y más bien creo me evita, me duele ya que nos estamos alejando y temo sea por Sasuke..

Yo aún estoy confundida con todo lo que paso y gracias a kamisama no hemos hablado acerca de eso, sinceramente dudo que lo que Sasuke dijo sea enserio, pero ahora no me preocupare por ello.

Vamos por nuestro equipaje y de ahi hacia su hogar, durante el trayecto observo la ciudad, es tan diferente a donde vivimos, pero muy linda..

Mikoto-san nos comenta que la boda será estilo japonés y sin duda se verán muy guapos.

Hoy asistiré a esa boda, donde finalmente diré adiós a un maravilloso hombre, el cual se que será muy feliz..

No sé si lo que me dijo Itachi el día que me hablo lo dijo enserio o no, pero más vale prevenir y no por esa amenaza, si no por que lo quiero y es un día muy importante para él.

Al llegar a nuestro destino, ellos nos reciben felices y apurados, tras descansar un poco y comer algo, empezamos arreglarnos, Sasuke no a dicho nada, parece analizar toda la situación, solo espero no me toque quedarme con él a solas o no sé como actuar..

Lo mejor es apurarme, no quiero hacerlos esperar y al estar lista bajo y al primero en ver es a

Quién me mira de pies a cabeza, ese acto me hace sentir extraña, ya que mi corazón se acelera y bueno yo también lo observó atenta, en verdad es muy guapo y al sentir mis mejillas sonrojarse por mi pensamiento, evito observarlo de más, ya que yo no puedo sentir ni verlo como un hombre y cuándo veo que se acercara a mi..

—Hinata se ve hermosa, por fin iba poder hablar con ella tras contemplarla, pero mi madre llega y..

Mikoto-san afortunadamente aparece y nos sonríe, ella luce un lindo vestido en color vino con pedrería en la parte del pecho, haciendo resaltar su piel y su amplia sonrisa la hace ver muy bonita..

—Desgraciadamente ya no pudimos hablar, ya que tenemos que partir hacia el lugar de la boda. Les extiendo la mano a ambas y al tomarlas, partimos hacia la recepción y finalmente después de dar muchas vueltas al fin llegamos -bajamos del taxi- y al entrar..