Beautiful Love

Eres él

Hola, primero que nada gracias a todas las que leen mi fic. Quiero compartirles un fanfic, yo no lo escribi, pero realmente es muy bueno, y fue uno de los primero que lei.
https://fanfic.es/viewstory.php?sid=36993&index=1

Espero les guste, gracias.

-¿Seguro que si va a venir?- pregunto DongSun a Kyuhyun mientras acomodaban unas mesas.
-Creo que si- le respondio este.
Ese dia era el aniversario del Instituto. Los exámenes habían terminado y solo eran 2 días de aniversario y después vacaciones.
-Yo ya quiero ver a Minnie- decía emocionado Eunhyuk.
-Yo tambien extraño a mi amiga- dijo DanYang mientras llegaba al salón, vestida de mesera con orejitas de gato. Su salón había escogido el tema de una cafetería cosplay.-Bueno chicos ya vallan a cambiarse-
-Te ves muy bonita asi- le dijo DongSun con una sonrisa.
-No me digas cosas asi, que me sonrojas.- dijo tomándose las mejillas.
*SeungMin, te extraño* pensaba DongHae mientras observaba aquella escena.

SeungMin se encontraba en su casa, arreglándose para poder ir al festival.
Llevaba mas de 3 días sin hablar con Kyuhyun y su padre notaba cierta incomodidad en ambos.

La hora del festival había comenzado. El patio se había llenado de puestos, ya sean de comida como de juegos. En la noche habría polvora y fuegos artificiales, el frio no impediría que los prendieran y observaran aquellas hermosas luces.

SeungMin bajaba del coche, recordando las palabras dichas por su padre.
"Si necesitas algo llamame, o a SungMin"
"Si te quedas mas tarde llama al chofer, o te vas con Kyuhyun"
"Diviertete, pero cuídate, no hagas excesos"

La chica sonrio recordando aquellas palabras, le gustaba estar de nuevo con su padre.
Camino a paso veloz hacia el salón, recordó que DongHae ya podía haber vuelto, le quería preguntar porque no había respondido a sus llamadas o por que no se había comunicado con ella. Tenia tantas ganas de abrazarlo, de besarlo, quería estar junto a el.
Se detuvo en seco al divisar a DongHae a lo lejos, pero este no iba solo, estaba con ShiRee. Su corazón sintio unas leves punzadas, ¿deberia seguirlos o no?

-Señora! Abra la puerta, se que esta ahí!- gritaba un hombre mientras tocaba con una gran fuerza la puerta.
-Disculpe...- se escucho detrás de el.
-Oh, señora, buenos días- dijo cambiando su tono de voz.
-Buenos días, ¿puedo saber a quien busca?- le pregunto muy amable la mujer.
-Busco a la dueña de la casa, ¿sabe de casualidad donde la puedo encontrar?-
-No, pero hace días que no la veo por las mañanas, supongo que va a trabajar-
-¿No sabe donde trabaja?-
-No, lo siento-
-Esta bien, y de casualidad no sabe algo sobre sus hijos-
-No...bueno, por la mañana siempre salen dos chicos, una chica y un chico, aunque es extraño, pues antes eran 3...y...-
-Oye Ga-Young, no tienes cosas que hacer? ¿Por qué estas dando información a desconocidos?-
-Disculpa, SunHee, pero tu no tienes que decirme que dejar de hacer- le respondio molesta la señora que estaba platicando con aquel señor.
-Tu deberías de respetar la privacidad de las personas-
-Sabes que, mejor me voy, platicar contigo ha sido un placer- dijo la señora sarcástica.-Adios señor, espero haberle sido de ayuda- dijo mientras se iba a su casa.
El señor volteo a ver a la señora de nombre SunHee, y esta solo se giro y se fue, dejando a aquella persona sola.


POV's SeungMin---------------------------------------------------------------------------------

-¿Dónde gusta sentarse?- me pregunto un chico vestido de Tuxido Mask (Sailor Moon), como tenia una mascara no podía saber quien era, pero su voz se me hacia familiar. Observe el lugar y note una mesa larga, donde se podía sentar una sola persona en un banco, esta estaba pegada frente a las grandes ventanas que mostraban la vista de afuera.
-Me gustaría sentarme alla- dije apuntando ese lugar.
-Ok, acompáñeme-
Segui a aquella persona, quien muy amablemente me acomdo el banco y me dio el menú.
-Mhh...¿podrias traerme un choco-flan, un mousse de chocolate y un te negro?-
-Si, enseguida le sirvo-dijo el chico yéndose.
Di un vistazo al lugar, pero no había rastro de alguno de mis amigos o de mi hermano.
-Aquí esta su orden, señorita, que la disfrute- me dijo el mesero amablemente.
-Oh! Gracias-
Mire hacia la mesa y note una pequeña hoja doblada, donde decía: