Beautiful Love

Perdóname...

Después de que volví de Japón el señor ha sido más estricto conmigo. Quiere que estudie más, ha contratado tutores de economía e idiomas. Había estado así por dos semanas, no tenía tiempo para ir a trabajar y poder ganar dinero para ahorrarlo y así lograr escaparme con SeungMin. Estaba desesperado por esta situación, si continuaba así mis planes fracasarían.

Ni siquiera me había podido contactar con SeungMin, estaba tan cansado que terminaba durmiendo o me desvelaba toda la noche para seguir estudiando. Un dia el señor me mandó llamar, entre con nerviosismo a su despacho, temía que haya descubierto que me encontré que SeungMin en Japón y que de alguna forma me alejara más de ella.

-DongHae, siempre te he tratado como un hijo-me dijo serio, mientras ponía sus codos en el escritorio-sé que a pesar de ser mi hijo biológico no está apto para manejar la empresa...pero tú, eres muy capaz...ya me lo demostraste yendo a Estados Unidos-se levantó de su silla hacia mí, yo estaba muy sorprendido ante sus palabras, no sabía cómo actuar-quiero que seas el heredero de mi empresa, conviértete en el presidente y haz de Dongsun tu vicepresidente...entre los dos manejen la empresa-

Yo realmente estaba sorprendido, no sabía qué hacer. Pero entendía que si aceptaba tal vez en el futuro podría tomar las riendas de mi vida, porque ya no le debería nada....todo lo suyo seria mío y no podría detenerme. ¿Sería esta la mejor opción para poder estar junto con SeungMin?...

-Mañana mismo te iras a Estados Unidos, estudiaras en Harvard, ya he arreglado todo-demonios, eso fue más rápido de lo que esperaba.

-Pero ¿y si no me quiero ir?-apenas logre decir. El volteo muy serio y me dijo con una voz muy gruesa-te iras-en definitiva...no podría hacer nada.

Me quitaron todo aparato de comunicación y me dejaron encerrado en mi habitación, todo lo que podía hacer era obedecer, pero al menos quería decirle a SeungMin que volvería por ella, que esperara por mí y que podríamos estar juntos más adelante pero no me dejaban hablar con nadie, ni con mi madre y mi hermana.

El dia siguiente llego, mis maletas ya estaban hechas, pero ni siquiera pude despedirme de mi familia. Me fui en silencio, pensando en la tristeza que sentiría mi madre y mi hermana, especialmente SeungMin. Le había prometido que iría por ella, que no la dejaría y ahora no puedo hacer nada. Que cobarde soy....

-Perdóname, SeungMin-susurre para mi mientras el avión despegaba.

SeungMin

Camine por mucho tiempo, no sabía a donde ir. Si me voy al extranjero puede llamar a la embajada y sabrá donde estoy, si regreso a Corea y me muevo en autobús será más difícil que me encuentre, eso hare, regresare a Corea y después veré a donde me voy. Conseguiré empleo y rentare algún lugar con lo que tengo guardado.

Me fui al aeropuerto, rogando para que mi padre no se encontrara ahí o que haya dado aviso de que no me dejaran salir del país, pero no fue así. Tome el avión de regreso a Corea, en Seúl vería a donde ir, no podía quedarme ahí porque era más fácil para el encontrarme. Buscare un pueblo o alguna isla, lo más lejano posible.

En el transcurso del vuelo revise mi celular, buscando una ciudad lejana, no podía volver a Daegu, sería el primer lugar en el que me buscarían. Necesitaba algo lejano a Seúl y a Daegu, un lugar donde ni siquiera pensarían que estoy. Me fije en las orillas, y me gusto Mokpo, ese sería mi destino.

Cuando llegamos a Seúl, apenas estaba atardeciendo, pero si no me iba ahora de ahí mi padre de seguro me encontraría, ya que podría encontrarme por medio de mi celular quite el chip, y lo formatee para que no supiera mi ubicación. Tome el autobús rumbo a la estación de trenes, donde tome uno rumbo a Mokpo, compre algo de comida en el tren para no desmayarme, pues no había comido nada desde la mañana.