Adiós Los Ángeles.

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Dormí bastante bien, la verdad, para a ver llorado toda la noche..

Me levanté y me dirigí al lavabo, me desvestí y me metí en la ducha, agua tibia cayendo por mi espalda, brazos y piernas, eso es lo que necesitaba.

Cuando acabé me puse unos shorts negros con una camisa negra que decía "fuck you" en blanco y unas vans negras, quería salir a tomar el aire, me sentía viva, bajé para desayunar

y se encontraban mis padres, sentados terrorificamente en las sillas metálicas de la cocina.

Oh oh- dije retrocediendo.

Eh, alto ahí jovencita..- dijo mi padre en tono amenazante, yo, por supuesto, me aturé y esperé a ver lo que me caería encima.- verás, tu madre y yo, hemos estado observando tus cambios de actitud, no son nada buenos- dijo negando- has cambiado mucho, no comes, no sales, no te comunicas, y las veces que sales, la lias, como lo del coche, y ahora, lo de anoche- se frotó la cara con sus manos- hemos decidido que vuelvas a casa- dijo de golpe.

QUE!?- dije sorprendida.

Por ti- dijo mi madre levantándose de la silla.

Me lo pensé repetidas veces, para ver sus contras y pros, y solo veía pros.

- No vería a Justin, o sea, lo olvidaría.

- Estaría con mis amigas.

- Sin mis padres.

- Sin mi pesada hermana, quien no para de hablar de Justin.

Lo decidì.

Vale- dije firme y segura.

Vale?- dijeron los dos al unísono al ver que no me oponía.

Si, tenéis razón- dije asintiendo.

Mmmm.... Vale...pues eso....volverás a casa- dijo mi padre lentamente para ver si reaccionaba.

Ya, te he oído- dije asintiendo.

Pues te vas mañana por la mañana, para que puedas despedirte de tus amigos y poder hacer las maletas con calma- me explicó, yo me pregunté, "que amigos?", en fin.

Vale, adiós- dije fingiendo que estaba triste, aunque en realidad les daba las gracias por volver a casa.

Me fui a mi habitación y empecé a pensar que se me olvidaba algo, y era que bajé a desayunar, así que volví a bajar y entré en la cocina, mis padres se habían ido a la sala principal, desayune un bol de cereales y fregué las cosas que ensucie.

Después de desayunar quería salir a dar una vuelta, hacía mucha calor así que me decidí a ir a la playa, me puse mi bikini y encima la ropa que llevaba antes puesta, en una bolsa puse; una toalla, crema solar, agua, chuches para picotear después por si al venir me apetece, un peine, mi monedero, las llaves de casa y el teléfono móvil.

Antes de Salir de casa cargando con la mochila llamé a un taxi, ya que la playa se encontraba bastante lejos, el taxi llegó y le di la dirección, cuando llegué le pagué y me bajé.

Fui caminando por la ardiente dorada arena para localizar un buen lugar, donde no hayan niños ni viejos verdes, al fin lo localice y dejé la mochila en el suelo, saqué la toalla y cojiéndola de las esquinas la extendí sobre la dorada y fina arena, me senté encima y cogí el bote de crema solar para seguidamente ponerme por todo el cuerpo.

Me tumbé, veía como pasaban chicos de mi edad, pequeños y grandes mirándome con deseo.

Pasó un castaño de ojos verdes y se me acercó, con su mochila colgando de un hombro, dejó la mochila en el suelo y sacó su toalla, mientras yo observaba todos sus movimientos, sorprendida, ya que el tenia pensado quedarse a mi lado, se quito su camiseta y pude ver sus abdominales bien marcados, sonrió tras ver mi cara de fascinación y se sentó a mi lado.

Hacia la aventura. (Justin Bieber) [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora