Algodón de azúcar

Parte dos

Barton terminaba de desvestir al castaño mientras besaba con pasión su cuello, sabía que iba a dejar marcas pero sinceramente no le importó hace tanto que moría por tomar el cuerpo de Peter y hacerlo suyo. Los gemidos terminaban por nublar la mente del arquero.

—Eres solo mío. —gruño entrando de lleno en Peter.

— Sólo tuyo. —respondió entre jadeos, las embestidas fueron rápidas y profundas provocando que el castaño arqueara la espalda de placer.

De nuevo era solo un estúpido sueño. Clint ya estaba harto de despertar con un problema entre las piernas y tomar duchas heladas constantemente. Ya había pasado un mes desde que Peter y el discutieron. Hace una semana intentaron solucionar todo pero todo se fue a la mierda con su insistencia de solo ser amigos.

Bajo a desayunar esperando que el resto de su día fuera mejor, pero al entrar a la cocina se encontró con Peter desayunando solo.

—¿Y los demás?—se atrevió a preguntar.

—Algunos fueron a shield, mis padres están en taller y Bruce en su laboratorio. —respondió sin verlo a la cara.

—De acuerdo. —El castaño no contestó y simplemente siguió comiendo en silencio. — Noté que has estado algo enfermo ¿Te sientes mejor?.

—No es de tu incumbencia. —respondió con resequedad.

—Me preocupó por mis amigos.

—Te dejé en claro que no soy tu amigo. —contesto molesto.

—Peter. —iba a decir algo pero fue interrumpido por Jarvis.

—Matt Murdock ha llegado por usted joven Peter.

—Gracias Jarvis. —dejo su desayuno de lado y tomo su mochila para irse.

—Ayer también saliste con él. —hablo con fastidio.

— ¿Y?— dijo frunciendo el ceño.

— ¿Que quiere el diablito contigo?—pregunto molesto.

—Lo que tú te niegas conmigo. — mintió.

—Se feliz con él. —dijo al ver como Peter se iba

El castaño y Daredevil habían quedado en ir por un café y pasar tiempo como amigos, al llegar a la cafetería Peter se mantuvo callado por un rato perdido en sus pensamientos.

— ¿Que sucede Peter?.

—No le he dicho que espero un bebé.

—¿Sigue evitando cualquier acercamiento?.

—Si. —Respondió triste— Mis padres comenzaron a sospechar, yo no sé qué hacer y Clint ni si quiera quiere aceptar que siente algo por mí.

—Tienes que decirle antes de que sea tardé. —le aconsejo Murdock.

Mientras tanto al otro lado el arquero estaba en la oficina de Fiury rogando por una misión que lo alejara por unos meses del castaño.

— ¿Estás seguro?— pregunto Nick nuevamente.

— ¡Sí!—dijo dejándose caer en la silla. — Solo mándame lejos.

—Hay una misión en Alemania, solo que estarás 7 meses fuera o hasta que la misión concluya. — Aclaró dejando una enorme carpeta en el escritorio. —Si aceptas tienes que irte hoy mismo.

—Lo haré. — Y así fue, Barton simplemente se fue sin decirle a Peter. No pasaron muchos días para sus padres se dieran cuenta que algo andaba raro con el castaño. Al principio fue difícil enfrentarlos solo pero todo lo hizo por ese pequeño que aún no nacía. Los meses transcurrieron rápidamente y Peter ya había perdido la esperanza de que​ Clint volviera.

Mientras tanto el arquero se dio cuenta que no importa que tan lejos del castaño este si aún va a seguir extrañándolo.

Así que un día simplemente volvió a pesar de que no había terminado la misión que tanto le había rogado a Nick Fiury. Volvió un viernes por la mañana a entrar a la torre ignoró por completo el saludo de todos y siguió su camino hacia la habitación de Peter.

—Peter despierta necesito hablar contigo. —toco la puerta varias veces, pero no recibió ninguna respuesta. —Peter—siguió insistiendo hasta que la puerta se abrió de golpe.

—Déjenme dormir, el bebé estuvo muy inquieto anoche y...

—Peter. —dijo sorprendido al verlo así. —Tú estás. —Su gesto de asombro cambio a uno de molestia. — Le daré en medio de los ojos. —El arquero se fue realmente molesto y Peter se quedó por un momento pasmado sin saber qué hacer, olvidando completamente que sin querer había metido a su mejor amigo en problemas.

Este capítulo contiene 666 palabras sin contar la nota. Los quiere The Sinner y su perro.