Esa noche me sentí fuera de lugar, habías decidido que saliéramos con el, su amigo y otra amiga nuestra, aunque para ser sincera siempre me sentía fuera de lugar cada vez que salíamos en grupo o nos encontrábamos con alguien mas, ninguna vez me sentí mal porque tu fueses la que recibía toda la atención, al contrario me divertía también con tus ocurrencias y bueno también había una que otra ocasión en la que me miraba en el espejo y me decía que es lo que andaba mal conmigo pero desechaba la idea rápidamente; te cuidaba también para que nadie se propasara contigo y no tomaras mas de la cuenta, es por eso que casi no tomaba, no porque fuera una aburrida pero creo que eso no importaba.
Salimos los cinco y no se porque pero algo en mi presentía que esa iba a ser la ultima vez que saldríamos, trate de disfrutarlo pero esa opresión en mi pecho no me dejaba.
-¿Estas bien?
-Si, solo estoy un poco cansada.
-No seas aburrida, diviértete un poco.
Como podía divertirme si veía que mi amiga se alejaba lentamente y cada vez mas de mi. Pense que serian celos así que lo deje pasar, pero después de un tiempo me empece a preocupar por ti y esa preocupación hizo que a tus ojos yo fuera la mala del cuento.
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Hola Amiga...
ContoNo solo una relación amorosa, algún noviazgo o cualquier parecido con esto puede romperte el corazón, también puede hacerlo una amiga, y en mi punto de vista este duele mas que cualquier otro. Esta historia es 100% hecha de mi autoria, no se aceptan...
